Baches en avenida Carranza complican circulación en Piedras Negras
Un nuevo bache sobre la avenida Carranza, a la altura de una antigua tienda de ropa frente a la calle Bordo, interrumpe fluidez
Automovilistas se enfrentan a complicaciones en la circulación debido a un bache reciente en la avenida Carranza, frente a la antigua tienda de ropa. Este tramo, que conecta el sur con el norte de la ciudad y la carretera 57, se ha convertido en un punto crítico para los conductores. La presencia de baches ha generado congestión vehicular, afectando especialmente a aquellos que transitan a diario por esta importante arteria.
La avenida Carranza, una de las principales vías de comunicación en Piedras Negras, ha vuelto a enfrentar dificultades debido a un bache que recientemente se abrió a la altura de la antigua tienda de ropa frente a la calle Bordo. Esta vía, que conecta el sur de la ciudad con el norte y también con la carretera 57, es una de las más transitadas por los automovilistas locales y visitantes.
En días anteriores, las autoridades locales habían realizado reparaciones en dos baches cercanos a este punto, sin embargo, en los últimos días, un nuevo agujero en el asfalto ha complicado la circulación de los vehículos, generando un impacto directo en el flujo de tránsito.
El bache en cuestión ha incrementado los tiempos de viaje para los conductores, quienes deben disminuir la velocidad para evitar daños a sus vehículos. Esta situación se ha vuelto un tema recurrente entre los habitantes de la ciudad, quienes se quejan de que la infraestructura vial de Piedras Negras sigue presentando fallas que afectan la vida cotidiana de los ciudadanos.
Avenida Carranza, arteria clave de circulación en Piedras Negras
La avenida Carranza es una de las arterias más importantes de Piedras Negras, ya que conecta varias zonas de la ciudad. Conectando el centro con la carretera 57, esta vía sirve como un acceso crucial para miles de automovilistas cada día. La importancia de esta calle hace que cualquier problema en su infraestructura afecte no solo a los residentes locales, sino también a quienes transitan por la ciudad en su camino hacia otras partes del estado de Coahuila.
A pesar de las reparaciones previas que se habían realizado en días pasados, el problema de los baches persiste, afectando especialmente a quienes transitan por este tramo durante las horas pico. Estos problemas no solo generan inconvenientes, sino que también elevan el riesgo de accidentes vehiculares, debido a la necesidad de los conductores de realizar maniobras bruscas para evitar el daño a sus vehículos.
Impacto del mal estado de las calles en el tráfico local
El mal estado de las calles en Piedras Negras ha generado preocupación entre los automovilistas. Aparte de la avenida Carranza, otras vías también presentan baches y huecos que complican la circulación y aumentan los tiempos de traslado. Esto ha provocado que muchas personas opten por caminos alternativos o reduzcan sus desplazamientos durante las horas de mayor afluencia vehicular.
La presencia de baches en arterias clave también ha dado pie a quejas por parte de los comerciantes de la zona, quienes mencionan que la congestión del tráfico afecta la llegada de clientes a sus negocios, además de que el deterioro de las calles deteriora la imagen de la ciudad.
Reparación de baches y medidas a largo plazo
Las autoridades locales de Piedras Negras han llevado a cabo varias reparaciones en las calles afectadas por baches, sin embargo, los problemas persisten debido a que no siempre se trata de soluciones definitivas. En el caso específico de la avenida Carranza, aunque en días recientes se habían reparado dos baches, un nuevo agujero ha aparecido en el mismo tramo, lo que hace pensar en la necesidad de un plan de mantenimiento más extenso.
Expertos en infraestructura vial sugieren que el problema de los baches podría estar relacionado con factores como la antigüedad de las calles y el intenso tráfico vehicular. Además, señalan que una mayor inversión en la mejora de la pavimentación y el mantenimiento preventivo podría reducir la frecuencia de estas averías, aunque esto requeriría recursos y tiempo.
