Se ha dado a conocer por parte de la jurisdicción el hecho de que se tenga precaución con la finalidad de evitar algún tipo de enfermedades producidas por la misma.
La epidemióloga de la Jurisdicción Sanitaria Uno, Fernanda Abril Hernández Medina, ha informado sobre la presencia de la chinche besucona en las afueras de Piedras Negras, una situación que ha generado preocupación en la comunidad hoy en día.
Según Hernández Medina, la presencia de esta especie ha sido detectada en las localidades de Centinela y Río Bravo por el departamento de Entomología.
Ingreso. Ante esto, se ha implementado un cerco y una revisión exhaustiva en estas áreas, incluyendo el ingreso a las viviendas para buscar y recolectar estas chinches por la noche, con el objetivo de enviarlas al laboratorio de salud pública para su examen.
Aunque es poco común encontrar esta chinche dentro de la ciudad, en las zonas rurales y con presencia de vegetación abundante, como en las afueras de Piedras Negras, es más frecuente su aparición. La chinche besucona es de importancia médica debido a que puede transmitir la enfermedad de Chagas, una enfermedad parasitaria que puede ser asintomática en sus etapas iniciales, pero que a largo plazo puede causar problemas cardíacos.
Preventivas. Hasta el momento, no se han reportado casos de contagio en la zona, pero se recomienda a la población estar atenta y tomar medidas preventivas, como realizar revisiones periódicas en sus hogares y, en caso de encontrar alguna chinche, acudir a realizarse una prueba de sangre para detectar la enfermedad a tiempo. La chinche besucona, también conocida como chinche de conchuela o vinchuca, representa un peligro significativo para la salud pública debido a su capacidad para transmitir la enfermedad de Chagas. Esta enfermedad, causada por el parásito Trypanosoma cruzi, puede ser mortal si no se diagnostica y trata adecuadamente. Aunque la picadura de la chinche besucona puede ser indolora e incluso pasar desapercibida, la presencia del parásito en su sistema puede tener consecuencias graves a largo plazo. Uno de los aspectos más alarmantes del Chagas es su capacidad para permanecer latente durante años e incluso décadas en el organismo humano sin mostrar síntomas. Esto significa que una persona puede estar infectada y no saberlo, lo que dificulta el diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno. A medida que la enfermedad progresa, puede afectar gravemente el corazón y otros órganos, causando problemas cardíacos, digestivos y neurológicos.
Es fundamental que la comunidad esté informada sobre los riesgos asociados con la chinche besucona y la enfermedad de Chagas, especialmente en áreas donde se ha detectado la presencia de estos insectos.
