Aunque acaba de ingresar al catálogo de Netflix, "Robo" (Stolen) ya se ha convertido en una de las cintas más vistas de la plataforma, no solo porque cuenta una historia cruda y que pone a reflexionar a los espectadores sobre la complejidad humana;
también porque se mezcla con escenarios impresionantes en los que la naturaleza juega un papel principal.
La película nos adentra en el mundo de los sami, una de las etnias más antiguas de Europa que cuentan con 80 mil integrantes repartidos entre Noruega, Suecia, Finlandia y Rusia. Esta historia se desarrolla en una pequeña comunidad sueca en la que el racismo, la discriminación y un horrible crimen amenaza con poner en peligro su modo de vida.
Según la sinopsis oficial, la trama sigue a "una joven que rastrea a un asesino para saldar una deuda persona", en la ficción se trata de Elsa, quien tiene el deseo y el objetivo de convertirse en pastora de renos, la actividad más importante dentro de su comunidad, pero que por el asesinato de estos animales ve muy lejos.
Dirigida por Elle Márjá Eira y Peter Birro, el filme se ha posicionado rápidamente entre lo más visto de la plataforma streaming y es que la historia de la protagonista, conforme se desarrolla, muestra una verdadera lucha contra todo lo que está mal en la sociedad. Elsa tiene que hacer frente a un sinnúmero de obstáculos, como la falta de apoyo por su propia comunidad o el hecho que, por ser mujer, su voz no sea escuchada.
Además, explora extensas áreas cubiertas de nieve habitadas por renos hasta majestuosas auroras boreales, las imágenes capturadas contribuyen a una experiencia visualmente impresionante.
El lanzamiento y éxito de "Robo" en Netflix no solo marca un hito importante para el cine sueco en la plataforma, sino que también subraya la importancia de la representación de las comunidades indígenas en el cine internacional.
Así que si estás buscando una película que te desafíe a pensar y te deje reflexionando mucho después de que los créditos hayan terminado, no te pierdas esta película.
