Ricky Rubio, que el cuatro de enero comunicó su retirada de la NBA tras rescindir su contrato con los Cleveland Cavaliers, anunció su incorporación a los entrenamientos del Barcelona, equipo en el que jugó entre 2009 y 2011 antes de iniciar su carrera en los Minnesota Timberwolves.
El base catalán, de 33 años, suspendió su carrera en el mes de agosto para tratar su salud mental apartándose de la selección española que preparaba el Mundial de Filipinas y al cabo de cinco meses fue cuando se dio por hecho, con su salida de la NBA, su retirada definitiva.
"Llevo unas semanas dándole vueltas y, tras otras tantas trabajando mente y cuerpo, me veo con ganas y fuerzas de ver cómo reacciono con un balón en las manos. Mi siguiente paso ha sido pedir al FC Barcelona si podría, sin ningún compromiso y sin interrumpir sus planes de temporada, entrenar con ellos. Agradecer de antemano su ayuda y comprensión con mi situación" publicó Ricky Rubio en su cuenta de la red social X, antes llamada Twitter, sin confirmar, pero tampoco descartándolo, su próximo fichaje oficial por el club azulgrana
Recuperado de sus problemas personales que le llevaron al abandono total de la práctica del baloncesto, el base catalán comenzará de inmediato a entrenar con el Barça, que mantiene sus derechos en Europa desde que en 2011 se marchase a la NBA resolviendo el contrato que mantenían ambas partes hasta 2015. Desde su vuelta a España el club azulgrana, a través del director general de su sección de baloncesto Juan Carlos Navarro, ha mantenido contacto con Ricky Rubio, abriéndole la puerta a una posible reincorporación que ahora se contempla ya cercana.
A partir de aquí el jugador tiene nueve días de plazo para decidir si da el siguiente paso y firma oficialmente por el Barça, teniendo en cuenta que el siete de febrero finaliza el plazo de la Euroliga para que sus equipos inscriban nuevos jugadores. En caso de no ser así aún podría firmar más adelante para competir solamente en la Liga española.
En el equipo azulgrana Rubio coincidirá, entre otros, con Jabari Parker, número dos del Draft en 2014 (por detrás de Andrew Wiggins) y que entre Milwaukee Bucks y Boston Celtics jugó 321 partidos en la NBA hasta 2022.
