Hoy comenzó el ciclo escolar y millones de niños regresaron a las aulas, haciendo que la atención a la nutrición infantil sea más relevante que nunca.
Expertos en salud, liderados por Angélica León Téllez-Girón, jefa de la División de Nutriología Clínica del Hospital General “Dr. Manuel Gea González”, han subrayado la importancia de un refrigerio escolar balanceado, compuesto por alimentos naturales y nutritivos, para mejorar la concentración de los estudiantes durante las clases.
El desayuno y el refrigerio escolar son momentos cruciales para impactar positivamente en la capacidad de concentración y el rendimiento académico de los niños y adolescentes. Según León Téllez-Girón, incluir frutas, verduras y cereales integrales en el refrigerio escolar tiene un efecto significativo en el bienestar físico y mental de los estudiantes. Estos alimentos, ricos en nutrientes esenciales, no solo proporcionan la energía necesaria para mantener la atención, sino que también ayudan a prevenir problemas de salud a largo plazo.
Los peligros de los alimentos ultraprocesados
León Téllez-Girón advierte que los alimentos ultraprocesados, que a menudo se encuentran en las loncheras escolares, son dañinos para la salud infantil. Productos como papitas, galletas, embutidos y cereales de caja están cargados de calorías vacías y carecen de los nutrientes necesarios.
El consumo habitual de estos alimentos está vinculado a un mayor riesgo de sobrepeso y obesidad, condiciones que ya afectan a un número alarmante de niños en México. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2020-2023, la prevalencia de sobrepeso y obesidad en niños y adolescentes es preocupante, alcanzando el 37% en menores y el 40% en adolescentes.
Además, dos tercios de esta población ingiere más del 10% de su energía diaria en forma de azúcares, superando la recomendación máxima de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Solo uno de cada cuatro niños y adolescentes sigue la recomendación de consumir frutas y verduras, lo que agrava el problema de la malnutrición.
Importancia del desayuno y una dieta equilibrada
León Téllez-Girón también destaca la importancia de un desayuno equilibrado antes de que los niños salgan de casa. Un desayuno adecuado no solo mejora la salud general de los menores, sino que también favorece la concentración, la atención y el aprendizaje durante el día escolar. Según la experta, la estructura ideal de la alimentación diaria para los niños debe incluir cinco tiempos de comida: desayuno, comida, cena o merienda, y dos colaciones, siendo una de ellas el refrigerio escolar.
Para optimizar la dieta de los menores, se recomienda incorporar tres tazas de verduras y al menos dos frutas enteras al día, en lugar de jugos, para aprovechar al máximo la fibra y los nutrientes. Además, es aconsejable que los niños consuman verduras de diversos colores a lo largo de la semana y una ración diaria de leguminosas, contribuyendo así a una dieta variada y equilibrada.