Cada vez más adultos mayores deciden poner fin a su actividad laboral plena para disfrutar de una pensión durante el resto de sus vidas.
En el pasado, jubilarse a los 60 años parecía un sueño, pero ahora más personas acuden al Instituto Mexicano del Seguro Social para tramitar su pensión.
Sin embargo, las nuevas generaciones no cuentan con pensiones tan generosas. Aquellos que cotizaron antes del 1 de julio de 1997, bajo el Régimen de 1973, disfrutan de una pensión más robusta que aquellos que comenzaron a cotizar después de esa fecha. Los "millennials" y "centennials" están asumiendo el liderazgo del país, mientras que los adultos han decidido retirarse.
Pensión. Sin embargo, las reformas laborales anteriores han dejado a las generaciones más jóvenes sin una pensión adecuada para su retiro, lo que los obliga a buscar formas de asegurar su futuro financiero. Cada año, más de 100 mil trabajadores se jubilan al alcanzar la edad requerida. Los trámites de pensión para aquellos de 60 años en adelante continúan en aumento, con dos regímenes diferentes en juego. Los especialistas, como Enrique Martínez Castro, ven esta tendencia crecer y ayudan a los adultos mayores a navegar por el proceso de solicitud de pensión. Martínez Castro enfatiza la importancia de garantizar una vida digna en el retiro y asegura que el IMSS debe pagar los fondos que los trabajadores han ahorrado.
Los porcentajes de pensión varían según la edad, con un aumento gradual a medida que se alcanza la edad de jubilación completa.
Sólidos. El panorama de las pensiones en México refleja una brecha generacional en términos de seguridad financiera en el retiro.
Mientras que las generaciones mayores pueden contar con pensiones más sólidas, las nuevas generaciones enfrentan mayores desafíos para garantizar su estabilidad económica en la jubilación.
Es fundamental que se aborden estas disparidades y se implementen políticas que aseguren un futuro digno para todos los trabajadores, independientemente de su generación.
