Las personas originarias de Venezuela, en su mayoría, dijeron que no los dejaron comunicarse con familiares.
Alguno Algunos migrantes que estaban a bordo de un autobús del Instituto Nacional de Migración, denunciaron a los medios de comunicación estar incomunicados y haber sido golpeados por agentes del INM, pues les habían quitado los celulares y a una mujer la golpearon porque los estaba grabando cuando los agredían, así que le quitaron el teléfono y la obligaron a borrar el video.
A través de la ventanilla del lado del chofer, los migrantes estaban narrando lo sucedido cuando los agentes de Migración intentaron cerrar la misma sobre los reporteros sin contestar el cuestionamiento del motivo por el cual estaban incomunicados, a la vez que el chofer cerró agresivamente por dentro la ventanilla casi dañando los teléfonos.
Quejas. En el autobús iban alrededor de 30 migrantes, a quienes los detuvieron en el ejido Primero de Mayo y otros por la zona del kilómetro 18 de la carretera 57, así como en Frontera, cerca de las vías del tren.
La mujer a la que golpearon externó que los policías de la Guardia Nacional los forcejeaban y los niños lloraban, y los de Migración los perseguían para "atraparlos" y a todos les quitaron los celulares para evitar que grabaran o llamaran a sus familiares.
Las personas que esperaban en el autobús señalaron que no les habían dado agua ni comida para los niños, pese a que habían pedido por compasión a los infantes, aunque en esos momentos llegaron platillos para el personal como para los migrantes, pues comenzaron a subir alimentos a la unidad.
Es el tercer día consecutivo en que los migrantes se quejan de las condiciones en que los detienen y trasladan al sur del país, pues no los deportan, sólo los envían a ciudades del sur.
Un día antes, el domingo, agentes del INM realizaron una redada en el municipio de Frontera, cerca de las vías del tren y del refugio de la parroquia del Verbo Encarnado, a donde llegaron algunos migrantes a refugiarse de la persecución que hizo Migración por las calles cuando los sorprendió en la plaza de la colonia Occidental desde donde los "correteó", dijeron.
Hermetismo. El personal del INM no proporcionó información ni despejó las dudas sobre el trato e incomunicación a los migrantes.
El autobús partiría hacia alguna población del sur del país para que los migrantes se regresen por sus propios medios a sus lugares de origen, dado que les han dicho que el gobierno mexicano no tiene recursos para llevarlos de regreso, pero tampoco los quieren en el país. Con el seguimiento de los primeros migrantes captados en el Centro de Rescate y Reclutamiento en el kilómetro 17, que opera desde el pasado día 3 de enero, se comprobó que a los migrantes los dejan en Tabasco o en Chiapas.
