Después del incidente en Querétaro entre la barra brava de los Gallos y del Atlas, la Liga MX tomó decisiones radicales para erradicar la violencia en el futbol; sin embargo, no todas se cumplen.
En este caso, la barra brava de Tigres asistió al estadio BBVA con una bandera representativa de la misma, lo cual es doblemente una falta al reglamento.
En un rincón del Gigante de Acero, decenas de aficionados auriazules con camisetas de los Libres y Lokos fueron a apoyar a su equipo, aunque el reglamento no lo permita.
En el último clásico regio de temporada regular, un aficionado de Tigres fue ubicado y vetado de todos los estadios por lanzar un vaso con orines a hinchas de Rayados.
