Asegura Saúl García que el aumento de las vacaciones y los incrementos en el salario mínimo han tensado la situación de los pequeños empresarios, especialmente en Acuña.
Tantas reformas laborales han provocado un estancamiento económico, lo cual ha alertado a los empresarios y los ha llevado a implementar medidas para sobrevivir, según Saúl García Ibarra, empresario en el sector lácteo de Ciudad Acuña.
García señala que, al menos, aún no ha habido una caída, pero en términos de crecimiento, se está quedando debiendo.
Añade que algo está sucediendo en la economía de los empresarios: "Ante todas estas reformas laborales, las pequeñas y medianas empresas estamos intentando encontrar las herramientas necesarias para sobrevivir a los cambios planteados".
Destaca que el aumento en los días de vacaciones para los empleados y el incremento salarial ha afectado incluso el aumento de los precios de todos los productos, lo que provoca que algunas empresas queden fuera de la competencia.
"He notado que la situación se ha vuelto un poco tensa, y los empresarios con quienes he hablado coinciden en que las reformas laborales han sido el factor principal del estancamiento económico.
"Esperamos que esto sea beneficioso para la mayoría, pero para los empresarios, que somos los generadores de empleo, los que pagamos impuestos y los que brindamos oportunidades para mejorar la economía en una comunidad, la situación no parece muy favorable", subrayó.
Finalmente, expresa que los empresarios esperan que, cuando los trabajadores tengan más vacaciones y más dinero, tengan también la capacidad de adquirir productos a precios ligeramente más altos.
