Un reciente informe de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha generado preocupación acerca de la venta de productos lácteos en México.
Marcas reconocidas como Nutri Leche de Grupo Lala, Carnation Clavel de Nestlé y Alpura Kids de Alpura, aunque populares, no son lo que parecen. Muchos consumidores creen que están comprando leche, pero en realidad, estos productos son fórmulas lácteas, una categoría diferente que podría comprometer la calidad nutricional de la alimentación de quienes los consumen.
Según el informe de Profeco, estos productos no cumplen con los estándares de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 155 para ser considerados leche pura. En vez de estar compuestos únicamente por leche de vaca, en realidad son fórmulas lácteas, que son mezclas con un contenido menor de leche y un porcentaje significativo de grasa vegetal, además de otros ingredientes añadidos como vitaminas y minerales.
Productos cuestionados
El informe de Profeco indica que productos como Nutri Leche y Carnation Clavel (en su versión en polvo) contienen mezclas de grasa vegetal, junto con vitaminas A, D, B1 y B2, y minerales como calcio y sodio. Sin embargo, su cantidad de proteína láctea es limitada, lo que los ubica en una categoría nutricionalmente inferior en comparación con la leche pura.
Por su parte, Alpura Kids, a pesar de estar fortificada con una variedad de vitaminas y minerales, también se clasifica como una fórmula láctea. Estos productos pueden incluir al menos un 22% de proteínas derivadas de la leche, de las cuales el 80% corresponde a caseína, una proteína de la leche de vaca. Sin embargo, la adición de grasas vegetales marca una diferencia clara en la calidad nutricional frente a la leche real.
Recomendaciones de Profeco
Una de las advertencias más relevantes que hace Profeco es la importancia de leer las etiquetas con atención. Aunque algunos de estos productos se presentan como saludables y nutritivos, su contenido real puede no alinearse con las expectativas de los consumidores. En ciertos casos, Profeco encontró que algunos productos afirmaban incluir nutrientes adicionales, como hierro, que en realidad no estaban presentes.