La vitrificación de óvulos es una opción para preservar la fertilidad de pacientes con insuficiencia ovárica prematura

El Dr. Luis Ruvalcaba Castellón, miembro fundador de la Sociedad Internacional de Trasplante de Útero (ISUTX) y profesor en la Universidad de Guadalajara en la subespecialidad de Biología de la Reproducción del Instituto Mexicano de Infertilidad (IMI), explicó en Medscape en español que el concepto de "menopausia precoz" se ha actualizado y ahora se denomina insuficiencia ovárica primaria o prematura.

Esta condición afecta a mujeres muy jóvenes que experimentan un agotamiento de su reserva ovárica.

Durante su conferencia sobre insuficiencia ovárica prematura en el XXXI Congreso Internacional de Ginecología y Obstetricia, el Dr. Ruvalcaba destacó que las mujeres nacen con aproximadamente dos millones de folículos, pero este número disminuye significativamente durante la vida. A los 20 semanas de gestación, el feto femenino tiene alrededor de 20 millones de folículos, pero al nacer, la cifra se reduce a dos millones. Al llegar la menarca, la primera menstruación, el número es de aproximadamente 200 a 400 mil folículos, muchos de los cuales degeneran antes de ovular.

El Dr. Ruvalcaba también señaló que condiciones genéticas como el síndrome de Turner pueden causar una pérdida acelerada de óvulos debido a la apoptosis, un proceso en el que los óvulos se deterioran sin ser ovulados.

El especialista subrayó que los ginecólogos deben utilizar la ecografía y la prueba de hormona antimülleriana para evaluar la reserva ovárica de las mujeres. Estas herramientas permiten a los médicos identificar la cantidad de folículos antrales y su estado, facilitando la recomendación de congelar óvulos para aquellas mujeres que no planean quedar embarazadas de inmediato.

Según el Dr. Ruvalcaba, la insuficiencia ovárica prematura es cada vez más frecuente debido a factores epigenéticos y ambientales, como la contaminación, el estrés, los cambios en el hábitat, el abuso de sustancias y el impacto de la COVID-19, que afectan la reserva ovárica.

La detección temprana de esta condición en mujeres menores de 38 años es crucial para que puedan considerar la congelación de óvulos, permitiéndoles preservar su fertilidad y utilizar óvulos de su edad cronológica cuando decidan ser madres en el futuro