La inteligencia artificial generativa (IA) podría transformar radicalmente la atención médica, acelerando el desarrollo de fármacos y mejorando la detección de enfermedades.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una advertencia sobre los riesgos asociados con los grandes modelos multimodales (LMM), una forma de tecnología de IA generativa en rápido crecimiento.
En un informe publicado el jueves, la OMS destacó cinco áreas en las que los LMM podrían desempeñar un papel crucial: cribado basado en peticiones escritas de pacientes, investigación científica y desarrollo de fármacos, educación médica y de enfermería, tareas administrativas y el análisis de síntomas por parte de los pacientes.
A pesar de estas oportunidades, la OMS advirtió sobre los posibles peligros. Los LMM, al utilizar diversos tipos de datos, como texto, imágenes y videos, podrían generar resultados falsos, inexactos, sesgados o incompletos. "A medida que se utilizan cada vez más los LMM en la asistencia sanitaria y la medicina, los errores, el mal uso y, por ende, los perjuicios para las personas son inevitables", señaló la OMS.
El informe también propone más de 40 recomendaciones éticas y de gestión para gobiernos, empresas tecnológicas y proveedores de atención médica.
Jeremy Farrar, científico jefe de la OMS, afirmó: "Las tecnologías de IA generativa tienen el potencial de mejorar los cuidados de salud, pero solo si aquellos que desarrollan, regulan y utilizan estas tecnologías identifican y tienen plenamente en cuenta los riesgos asociados".
La OMS insta a establecer normas de responsabilidad para garantizar la indemnización adecuada de los usuarios perjudicados por un LMM y resalta preocupaciones sobre la protección de datos y el cumplimiento normativo. Además, la participación activa de profesionales de la salud y pacientes en el desarrollo y la implementación de estas tecnologías es crucial.
El informe también subraya la vulnerabilidad de los LMM ante los riesgos de ciberseguridad, que podrían comprometer la información de los pacientes y la confiabilidad de la atención médica. La OMS concluye recomendando a los gobiernos que encarguen a las autoridades reguladoras la aprobación del uso de LMM en la atención médica y la realización de auditorías para evaluar su impacto.
Mientras la IA promete avances significativos en la salud, la cautela y la regulación rigurosa son esenciales para garantizar que los beneficios superen los riesgos asociados con estas tecnologías innovadoras.
