Fue recuperado de una diligencia cuando el hotel sufrió una extorsión por 120 mil pesos y después se realizó el hurto mencionado.
Transcurrido casi un año desde un acto de extorsión en el Hotel Torreón, situado en la calle Zaragoza del centro de la ciudad, la Fiscalía General del Estado celebró un logro significativo al recuperar la totalidad del dinero sustraído, entregándolo finalmente al propietario del establecimiento.
La historia se remonta al 13 de febrero de 2023, cuando un recepcionista, engañado por una llamada donde el interlocutor se hacía pasar por el propietario, extrajo 120 mil pesos de la caja fuerte.
Robo. Este monto fue depositado en varias tiendas de conveniencia, pero desafortunadamente, individuos desconocidos lograron robar alrededor de 1 millón de pesos. Desde el inicio, el propietario, identificado como Guadalupe Pérez Varela, presentó la denuncia correspondiente. La respuesta efectiva de la policía, la unidad cibernética y la institución bancaria nacional fue clave para el éxito de la investigación, logrando la recuperación tanto del dinero físicamente robado como de las sumas depositadas en las tiendas.
Aunque el proceso fue extenso, particularmente debido a la dificultad del afectado para acreditar la procedencia del efectivo, finalmente se confirmó la legitimidad del dinero. Este fue devuelto a los propietarios, destacando la importancia de la denuncia oportuna y la colaboración entre las autoridades para alcanzar resultados positivos en casos de esta naturaleza.
Hechos. Como se recordará al inicio del fenómeno migratorio, el Hotel Torreón se convirtió en un lugar donde la mayoría de los huéspedes eran migrantes centroamericanos que buscaban refugio temporal en su travesía hacia Estados Unidos. La acogida a estos migrantes se convirtió en una tarea crucial para el hotel, que se esforzaba por proporcionar un ambiente seguro y digno. La administración del hotel colaboró con las autoridades locales y organizaciones humanitarias para asegurarse de que los migrantes recibieran el apoyo necesario durante su estadía. Sin embargo, la situación dio un giro inesperado cuando el establecimiento fue víctima de una extorsión, poniendo a prueba su compromiso con la seguridad y bienestar de quienes se hospedaban allí. Ante este nuevo desarrollo, las autoridades también iniciaron una indagatoria exhaustiva para verificar si el Hotel Torreón estaba en contubernio con alguna red de tráfico de personas. La complejidad de la situación llevó a profundizar en las posibles conexiones entre la extorsión sufrida y actividades ilegales relacionadas con la migración. La investigación se centró en evaluar la transparencia y legalidad de las operaciones del hotel.
