El inicio de 2024 en México ha estado marcado por una ola de violencia, con al menos 308 personas asesinadas en los primeros días de enero, según cifras preliminares de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
El día más violento fue el miércoles 3 de enero, con 68 asesinatos reportados, seguido por el 4 de enero con 66, 1 de enero con 60, 2 de enero con 58 y el 5 de enero con 56.
Tan solo lo ocurrido en Guerrero, donde se reportaron ataques con drones y balaceras en palenques, sobrepasa lo violento y raya en lo brutal.
En Michoacán, uno de los estados que encabeza la lista de muertes dolosas de 2024, van 9 víctimas, seguido por Chihuahua con 7 y el Estado de México con 5.
Guerrero, el escenario del mencionado ataque con drones de la delincuencia organizada, reportaba 2 muertes hasta el 5 de enero, que habrán de ajustarse al confirmarse el saldo de la calificada como masacre.
Pero, Guanajuato, que este año renovará la gubernatura en manos del PAN, comenzó el año como la entidad más violenta, con 35 víctimas.
En el caso de Guerrero, las autoridades recorrieron la zona, pero evitaron comunicaciones a detalle.
En tanto, a nivel federal, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó en su conferencia mañanera que durante el periodo de Guadalupe-Reyes, la violencia disminuyó en el país, pasando de un promedio de 80 asesinatos diarios a 60.
Sin embargo, a pesar de esta declaración, el país sigue enfrentando un grave problema de inseguridad y violencia, por lo que el desafío para las autoridades es claro: abordar y solucionar la creciente ola de incertidumbre que afecta a diversas regiones de México, con la implementación de estrategias efectivas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y reducir estos alarmantes números de homicidios.
El año electoral avanza y el discurso es rey, pero el aumento de la violencia en el país representa un llamado urgente a la acción por parte de las autoridades, quienes deben trabajar en conjunto para encontrar soluciones integrales que aborden las raíces del problema y protejan la vida de los ciudadanos, después de todo, es su principal deber.
