En noviembre del año pasado, elementos del Ejército y de la FGR detuvieron en la capital de Sinaloa a Néstor Pérez, con base en una orden de aprehensión con fines de extradición a los Estados Unidos.
Néstor Isidro Pérez Salas, alias “El Nini”, quien fuera jefe de seguridad de “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa, tramitó el cuarto amparo para evitar su extradición a Estados Unidos, donde una Corte del estado de Columbia lo requiere por tráfico de cocaína y metanfetamina.
En esta ocasión, Pérez Salas, detenido en noviembre del año pasado por el Ejército mexicano, recurrió a la protección de la justicia ante la titular del Juzgado Segundo de Distrito de Amparo en Materia Penal de la Ciudad de México, Paloma Xiomara González González, quien admitió a trámite la demanda.
En su resolución, la jueza señaló que se localizaron “los juicios de amparo 129/2024 y 979/2023 del índice del Juzgado Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México; así como el diverso 1078/2023 del registro del Juzgado Sexto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México”, los cuales podrían tener relación con el presente asunto, ya que fueron promovidos por Pérez Salas, quien se encuentra preso en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
Tras su detención, el Juzgado Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México le concedió una suspensión de plano para que la FGR no le entregara en fast track a Estados Unidos.
En noviembre del año pasado, elementos del Ejército y de la Fiscalía General de la República detuvieron en la capital de Sinaloa a “El Nini”, con base en una orden de aprehensión con fines de extradición de los Estados Unidos.
La Corte de Distrito de Columbia requiere a Néstor Isidro Pérez Salas para ser procesado por conspiración para tráfico de cocaína y metanfetamina y posesión de armas.
El gobierno de los Estados Unidos ofrecía una recompensa de 3 millones de dólares por información que llevara a su captura.
Era considerado por las autoridades mexicanas como uno de los principales generadores de violencia en Sinaloa.
