Ejidatarios de núcleo agrario “El Bajío” celebraron que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano haya reconocido sus derechos como propietarios después de más de dos décadas de despojo.
Ejidatarios de núcleo agrario “El Bajío” en Caborca, Sonora, donde se ubica el mayor yacimiento de oro en el país y que es explotada por la Minera Penmont, celebraron que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) haya reconocido sus derechos como propietarios después de más de dos décadas de despojo.
En entrevista después de una reunión con senadores, Abel, José Concepción y Carmen Cruz Pérez, así como Luis Enrique Cruz Figueroa y Erasmo Cruz López, expusieron que la Sedatu a través de la Procuraduría Agraria y el Registro Agrario Nacional haya acatado una resolución judicial a su favor.
Destacaron que dichas autoridades acataron lo ordenado por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Penal y Administrativa con sede en Hermosillo, Sonora, en la ejecutoria 39/2024, donde se ordenó la inscripción de la sentencia a favor de los cinco propietarios de los terrenos derivada del expediente agrario 188/2009.
La resolución judicial los reconoce como los únicos con derechos sobre la totalidad de las tierras de uso común para explotar, usar y disfrutar las mismas, esto ante la negativa de la magistrada Alejandrina Gámez Rey, titular Tribunal Unitario Agrario Del Distrito 28 con sede en Hermosillo, Sonora, quien, afirmaron, a obstaculizado la ejecución de la sentencia de noviembre de 2011.
Asimismo, los 67 juicios de los demás ejidatarios, lo anterior favoreciendo a Jesús Javier Thomas González, quien públicamente se ha ostentado como el representante del ejido. “Todo ello de manera falsa y dolosa”, dijo Abel Cruz quien celebró está determinación de la Sedatu ante el despojo de sus terrenos.
