Un equipo de investigadores brasileños ha desarrollado una vacuna prometedora que podría transformar el panorama en torno al virus del Zika. Utilizando tecnología avanzada de manipulación de ADN, los científicos han creado una fórmula que ha demostrado ser altamente efectiva en pruebas preclínicas con ratones de laboratorio.
Este avance, parcialmente financiado por la Fundación de Apoyo a la Investigación del Estado de Sao Paulo (Fapesp), marca un paso crucial hacia la protección contra un virus que ha generado gran preocupación a nivel mundial.
El virus del Zika, conocido por causar graves malformaciones congénitas como la microcefalia en recién nacidos, ha sido una amenaza constante en regiones tropicales y subtropicales. Hasta ahora, no se había aprobado ninguna vacuna para prevenir esta enfermedad.
Este nuevo desarrollo, liderado por científicos de la Universidad de Sao Paulo (USP) y la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el principal centro de investigación en salud de Brasil, ofrece una renovada esperanza.
La vacuna fue diseñada utilizando tecnología de ADN, lo que permite crear fórmulas basadas en la selección de las partes más importantes del virus y la adición de sustancias que potencian la respuesta inmunitaria. Franciane Teixeira, primera autora del estudio, subrayó que esta tecnología es de bajo costo y relativamente fácil de implementar, lo que la convierte en una alternativa atractiva frente a las vacunas tradicionales.
El equipo desarrolló cuatro formulaciones diferentes de la vacuna, todas dirigidas a partes del complejo proteico que recubre el virus del Zika. Al inyectar la vacuna, las moléculas de ADN ingresan en los núcleos celulares del huésped, donde producen proteínas idénticas a las del virus. Esto estimula al sistema inmunitario a generar anticuerpos capaces de neutralizar el Zika y activar otros mecanismos de defensa.
En las pruebas preclínicas, los ratones tratados con la vacuna mostraron una respuesta inmunitaria robusta, con altos niveles de anticuerpos neutralizantes. Además, la adición de sales de hidróxido de aluminio como adyuvantes mejoró aún más la respuesta inmunitaria, proporcionando una protección prolongada tras la exposición al virus.
A pesar de estos resultados positivos en las pruebas iniciales, el desarrollo de una vacuna aprobada para uso humano aún enfrenta varios desafíos. Uno de los principales problemas es la similitud entre el virus del Zika y los cuatro serotipos del dengue. Esta semejanza plantea el riesgo de reacciones cruzadas, donde los anticuerpos producidos por la vacuna contra el Zika podrían reconocer los virus del dengue, facilitando su entrada en las células del hospedador y potencialmente agravando la infección