Crisis en la PTAR de Jardines del Valle, Monclova.
Un total de 22 vecinos han presentado síntomas de intoxicación y otras enfermedades, entre ellos varios menores
Un grito de auxilio resuena entre los vecinos de la colonia Jardines del Valle de Monclova, debido a una prolongada crisis en la Planta Tratadora de Aguas Residuales (PTAR), que despide pestilentes olores y gases, que no permiten una vida normal.
La instalación, anteriormente propiedad de AHMSA, ha sido el epicentro de un grave problema de salud pública que persiste desde que la Comisión Federal de Electricidad redujo drásticamente su suministro eléctrico, limitando su operatividad al mínimo indispensable.
La PTAR, diseñada para tratar las aguas residuales generadas por la comunidad de Monclova y Frontera, así como las industrias locales, dejó de funcionar al 100% tras la crisis financiera de AHMSA, quedando operativa solo al 5% mediante plantas de luz que utilizan combustible.
Esta reducción drástica en la capacidad operativa ha llevado a la acumulación de residuos y al estancamiento de aguas malolientes, generando molestias y riesgos para la salud de los residentes.
Descargas contaminadas
Recientemente, la situación se agravó con la recepción de dos grandes descargas de agua contaminada procedente de sectores industriales del oriente y centro de la ciudad. Estas aguas, cargadas con desechos industriales como aceites y gases, ingresaron al sistema de drenaje y llegaron a la PTAR, comprometiendo gravemente las bacterias y microorganismos esenciales para el tratamiento efectivo del agua.
Consecuencias para la Salud
Los efectos adversos han sido significativos. Más de 22 vecinos han reportado enfermedades que van desde dermatitis y conjuntivitis hasta problemas gastrointestinales severos y casos de dengue hemorrágico, atribuidos a la proliferación de mosquitos en aguas estancadas en la planta.
Vecinos como Julia del Bosque, Rubén Ortiz Borrego y Macarena Contreras, con más de 50 años en la colonia, han sido testigos directos de cómo esta crisis ha afectado su calidad de vida y salud de manera devastadora.
Entre los contaminantes detectados en la PTAR se encuentran el metano, sulfuro de hidrógeno y oxígeno, todos ellos generadores de preocupación por sus efectos nocivos para la salud humana y el medio ambiente. Estos gases, junto con los malos olores persistentes, han contribuido a crear un entorno insalubre y poco seguro para los residentes de Jardines del Valle.
A pesar de los persistentes reclamos de los residentes, las autoridades locales han sido criticadas por su falta de acción y por no cumplir con las promesas de resolver este problema durante diversas administraciones municipales.
Los vecinos, cansados de vivir en condiciones insalubres y enfermizas, han expresado su frustración y han amenazado con tomar medidas más drásticas si no se atiende de manera inmediata esta crisis de salud pública.
Se han propuesto diversas soluciones, como la reactivación completa de la PTAR con suministro eléctrico estable y la implementación de tecnologías avanzadas para el tratamiento de aguas residuales y la mitigación de olores. El uso de filtros de carbón activado ha sido sugerido como una medida para retener los malos olores y mejorar la calidad del aire en la comunidad.
En resumen, la situación en Jardines del Valle representa un claro llamado de atención sobre la necesidad urgente de abordar efectivamente los problemas relacionados con la gestión de aguas residuales y la salud pública. Es crucial que las autoridades actúen con prontitud y decisión para restaurar la tranquilidad y seguridad de una comunidad que ha sufrido demasiado tiempo las consecuencias de esta crisis.
El alcalde Mario Dávila ha expresado preocupación y ha anunciado que se está investigando la fuente de las descargas contaminadas, con sospechas centradas en un taller o empresa local. A pesar de los persistentes reclamos de los residentes, las autoridades locales han sido criticadas por su falta de acción y por no cumplir con las promesas de resolver este problema durante diversas administraciones municipales. Los vecinos, cansados de vivir en condiciones insalubres y enfermizas, han expresado su frustración y han amenazado con tomar medidas más drásticas si no se atiende de manera inmediata esta crisis de salud pública.
Por su parte Julio Ríos director de Protección Civil, señalo que ya se realizan recorridos en los colectores de descarga para dar con la descarga contaminada para sancionarse a la empresa o taller que esté tirando los contaminantes hacia la planta.
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