Sin importar las complicaciones, el comedor permanecerá abierto.
La delincuencia y vandalismo en la colonia Colinas de Santiago no ha dejado exento al comedor en donde diariamente consumen alimentos más de 40 personas y es mantenido por parte del Banco de Alimentos, región siderúrgica en coordinación con la iglesia católica.
Jorge Salvador Guzmán, sacerdote encargado del sistema de comunicación de la Diócesis de Saltillo, indicó que, en distintas ocasiones, les han robado el tinaco, las tuberías o el cableado eléctrico y es por ello que la comunidad católica y Cáritas apoya para que se reponga lo robado y sé de servicio a los niños y abuelitos que acuden diariamente para recibir los sagrados alimentos.
El sacerdote contó que, sin importar las complicaciones, el comedor permanecerá abierto para seguir beneficiando a los más necesitados.
