El gobierno actual federal dejó de enviar recursos para obras a los estados, centralizó la ejecución de obras al ejército y dejó de licitar.
La opacidad del Gobierno Federal en la asignación de obras y una caída considerable del presupuesto de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes a los Estados, mantiene al sector constructor oprimido mientras la federación da los proyectos al ejército, no lícita y no se genera empleo, enfatizó Eugenio Williamson Iribarren, presidente de la CMIC en Monclova.
Recordó a las autoridades que las empresas son las que generan empleo, el ejército no, y al dar todas las obras a sus militares, está rompiendo con el ciclo de la economía. Citó que el año pasado, Coahuila recibió de la federación 120 millones de pesos para obra carretera con mil 600 kilómetros de red, cuando antes de AMLO se destinaban mil 800 millones de pesos.
Comparación. "El año pasado fue un vergonzoso presupuesto de 120 millones de pesos y, para tener una idea, el último año de Peña Nieto fueron alrededor de mil 800 millones de pesos y el primer año de López Obrador, que era un presupuesto ya asignado por Peña Nieto, fueron mil 600 millones de pesos y después ya nos quitaron el presupuesto", destacó Williamson.
Con el presupuesto federal se hacía el mantenimiento a carreteras, caminos, ampliaciones, reparaciones y distintas obras, dijo, pero, "ahorita no alcanza ni para tapar los baches y es un problema grave que no se ha atendido".
Resaltó que, además, el sector constructor está afectado porque la poca obra que existe, la federación se las da al ejército de manera directa, sin licitar, no hay transparencia ni les permiten participar cotizando obras. Subrayó que no se está generando empleo ni impuestos por las empresas, al frenar el gobierno la economía.
