La interrogante en la posición de quarterback es lo más importante en el receso de campaña de los Denver Broncos.
El head coach Sean Payton envió a Russell Wilson a la banca con dos partidos restando en la temporada regular del 2023. La extensión de contrato por cinco años y 242.6 millones de dólares a la que accedieron los Broncos en el 2022 es ahora un factor significativo en lo que harán los Broncos, o en lo que pueden hacer, a futuro, en caso de que Wilson sea liberado, como esperan muchos alrededor de la liga.
El propietario y/CEO Greg Penner dijo al término de la temporada que "la parte financiera es un componente significativo en términos de cómo se resuelve a futuro, pero no será lo que empuje la decisión. La decisión será tomada por lo que sea en el mejor interés de que este equipo de fútbol americano gane partidos".
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Retener a Russell Wilson
¿Un año más? Dejar libre a Wilson antes del inicio del periodo de agencia libre traerá un cargo por dinero muerto de 85 millones de dólares para el tope salarial de los Broncos a lo largo del siguiente par de campañas.
Ese sería un movimiento que el gerente general George Paton describió como "extremo'' justo al término de la temporada, incluso diciendo que los Broncos estaban "preparados para cualquier escenario'' con el tope salarial.
Durante la semana de Super Bowl, Payton dijo que él y Wilson llevaban una "gran relación'' y que no se había tomado ninguna decisión. Pero, la casa de Wilson en Denver está a la venta y fuentes múltiples cercanas a él señalan que el quarterback espera aterrizar en otro lado.
Después de una degradación a la banca muy pública, y la declaración de Wilson de que los amenazaron con sacarlo de la alienación desde la mitad de temporada si no aceptaba reestructurar su contrato, muchos ejecutivos de personal en la liga consideran que las posibilidades de que él brinde a al club un respiro financiero con su contrato, son mínimas. Uno lo describió como "infinitesimal''.
Ascender en el orden de draft
Entregar dos o tres selecciones para acceder a uno de los mejores prospectos en la posición de quarterback requiere capital... y bastante. La temporada pasada, los Carolina Panthers enviaron a los Chicago Bears dos turnos de primera vuela ('23 y '24), dos turnos de segunda vuelta ('23 y '25) y al receptor abierto DJ Moore para escalar desde el puesto N° 9 al N° 1.
Los Bears ostentan el turno N° 1 de este año gracias a ese intercambio, así que suponer que aceptarían algo que no rivalice con lo que recibieron en abril pasado sería un sueño. Ellos saben lo que vale.
Los Broncos no han contado con un turno en la primera ronda desde que seleccionaron a Pat Surtain II en el 2021, y han ejercido apenas tres selecciones entre las primeras 45 en los cuatro drafts pasados combinados.
Denver cuenta con el turno N° 12, así que necesitaría armar una oferta cuantiosa para escalar cerca del inicio del orden. Incluir a Surtain o algún otro jugador de alto perfil para concretar un intercambio también reduciría el nivel de talento en un equipo que no ha terminado una temporada por arriba del .500 desde el 2016. Los Broncos cuentan con seis selecciones en el draft de abril, ninguna en la segunda ronda.
Esencialmente, intentarían sumar a un prospecto novato en la posición de quarterback, a una plantilla que debe verse destripada para obtenerlo.
Nivel de viabilidad: Seguro, es posible, el precio es aterrador.
