Ansiedad y depresión aumentan 25% en México: ¿Cómo cuidar la salud mental?

Este dato, proporcionado por la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), subraya la urgente necesidad de mejorar los servicios de salud mental en el país.

La Dra. Carmen Amezcua, especialista en Psiquiatría Integrativa, sostiene que la situación de la salud mental en México se ha convertido en una crisis que requiere un enfoque renovado.

"En México, estamos inmersos en un ciclo de conflictos que incluyen problemas sociales, inseguridad, violencia y desastres naturales causados por el cambio climático, lo que incrementa el sufrimiento psicológico", comenta.

Este problema no es exclusivo de México. La Organización de las Naciones Unidas indica que la ansiedad y el estrés postraumático afectan a todos los grupos sociales debido a eventos estresantes. El censo 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) muestra que más de 590,000 personas en México padecen algún trastorno mental, con una distribución del 54% de hombres y 46% de mujeres.

Desafíos en la atención de la salud mental

El sistema de salud en México enfrenta importantes dificultades para proporcionar una atención adecuada a los pacientes con enfermedades mentales. Los gobiernos han visto superadas sus capacidades, lo que ha llevado a un llamado para una acción coordinada entre profesionales de la salud, la comunidad y las autoridades. Es fundamental reforzar los hábitos de vida saludable para prevenir complicaciones.

"Es necesario ver la salud mental no solo como un problema que afecta a algunos individuos. Debemos entender que es una cuestión multifactorial que se origina por condiciones biológicas, pero también por el entorno económico, social y familiar", afirma la Dra. Amezcua. Este enfoque integral es esencial para abordar los trastornos mentales de manera efectiva.

La Psiquiatría Integrativa, un enfoque novedoso en comparación con la psiquiatría tradicional, utiliza la medicina de estilo de vida para tratar las causas fundamentales de los problemas de salud mental. Este enfoque abarca aspectos como la nutrición, la actividad física, el sueño, la reducción del riesgo por consumo de sustancias, el bienestar psicológico y espiritual, la gestión del estrés y las relaciones interpersonales saludables.

Los trastornos mentales como la depresión mayor y los síntomas subclínicos de la depresión a menudo se presentan junto con afecciones físicas graves y crónicas, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. Esta comorbilidad incrementa la carga de las enfermedades y agrava las barreras para lograr cambios efectivos en el estilo de vida. Por ello, un enfoque integral es clave para mejorar los resultados de salud.