López Obrador busca dejar un legado de cercanía y empatía hacia las familias afectadas por las tragedias mineras.
Durante esta visita, el mandatario se reunirá con los familiares de los mineros que perdieron la vida en las minas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tiene programada su última visita a Coahuila. Durante esta visita, el mandatario se reunirá con los familiares de los mineros que perdieron la vida en las tragedias de Pasta de Conchos y El Pinabete, eventos que han marcado profundamente a la comunidad coahuilense.
Un comunicado emitido por el Gobierno Federal ha extendido una cordial invitación a las familias de los mineros, enfatizando la importancia de este encuentro.
Se ha dispuesto un servicio de transporte que estará disponible de 10:30 a 11:40 de la mañana en el estacionamiento de la Infoteca de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAC). Cada familia podrá enviar hasta tres representantes para asistir a la reunión con el presidente, lo que refleja el compromiso del gobierno por escuchar y apoyar a las víctimas y sus seres queridos.
Encuentro. Cabe recordar que esta no es la primera vez que López Obrador se reúne con estas familias. En junio, el presidente ya había llevado a cabo un encuentro similar, acompañado por la presidenta electa Claudia Sheinbaum, lo que subraya la atención continua que su administración ha brindado a este tema sensible.
El 23 de septiembre también marca un momento significativo en la agenda del presidente, ya que se considera su despedida oficial de los coahuilenses en su última semana en el cargo. A lo largo del año, se había anticipado su presencia en Piedras Negras para el banderazo de inauguración de las obras de remodelación de la Aduana Local y la ampliación a 12 carriles del Puente Internacional Dos.
Actividades. Sin embargo, hasta el momento no se han agendado actividades en esta localidad para la fecha mencionada. Con esta última visita, López Obrador busca dejar un legado de cercanía y empatía hacia las familias afectadas por las tragedias mineras, reafirmando su compromiso con la justicia social. La atención prestada a estos casos y la continuación de proyectos de infraestructura son pasos fundamentales para el desarrollo y bienestar de Coahuila. La esperanza es que, bajo la nueva administración, se mantenga el enfoque en la inclusión y el apoyo a las comunidades que han sufrido, asegurando que las lecciones del pasado guíen un futuro más justo y prometedor. A medida que se avanza en los proyectos de infraestructura, se espera que la nueva administración continúe con las medidas en el futuro.
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