El hoy administrador apostólico indicó que su tiempo lo dividirá entre Piedras Negras y Monterrey de donde es originario.
Tras el anuncio del nuevo Obispo de la Diócesis de Piedras Negras, quien tomará protesta y asumirá la responsabilidad a partir del 31 de julio, Alonso Garza Treviño fue cuestionado sobre sus planes futuros, ya que dejará de liderar todas las parroquias de Coahuila.
En respuesta, expresó que su proyecto es continuar sirviendo a la comunidad en todo lo necesario, disponiendo de más tiempo para esta actividad que es su mayor deseo: servir a los demás.
Entre Piedras Negras y Monterrey. Otra de las preguntas dirigidas al actual administrador apostólico fue si radicaría en Piedras Negras o volvería a su ciudad natal, Monterrey. Señaló que lo hará de manera simultánea, pasando algunos días aquí y temporadas en la sultana del norte, donde tiene familiares y fieles con quienes mantuvo una relación durante su tiempo como sacerdote. Sin embargo, en Piedras Negras ha cultivado una importante y estrecha amistad con la comunidad y los fieles que lo apoyaron en el crecimiento de la Diócesis, recordando que al llegar sentó los cimientos para lo que se tiene hoy en día.
Relevante. Anteriormente, Piedras Negras y la región estaban bajo la Diócesis de Saltillo, por lo que guarda un cariño muy especial por esta región, en la que pudo desempeñar un cargo tan relevante al tener bajo su mando toda una Diócesis, atravesando tiempos difíciles como la violencia de los años 2010 al 2015 y fenómenos naturales que han dejado huella en los municipios, como tornados, inundaciones y otras situaciones que han fortalecido las comunidades, apoyadas en gran medida por la iglesia.
También resaltó la cantidad de sacerdotes que se han ordenado durante su tiempo al frente, teniendo en un salón del Obispado las fotos de cada uno de ellos.
En estos momentos, la mayoría de los párrocos y capellanes han sido instruidos por él y han recibido su bendición.
