WWE está viviendo horas críticas tras el regreso de Vince McMahon a la cabeza de la compañía para, supuestamente, venderla al mejor postor. El Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita se alza como el principal destino de la empresa de lucha libre más grande del mundo.
Los reportes aseguran que las platicas han avanzado favorablemente entre ambas partes pero están lejos de llegar a un acuerdo final, según información que llegó de primera mano a TMZ. El martes por la noche fue cuando el rumor de la venta estalló y desde entonces Arabia Saudita ha tenido los ojos del mundo del wrestling encima.
El miércoles se dio a conocer que McMahon enfrentará una demanda en el estado de Delaware por manipular la votación que lo trajo de vuelta a la junta directiva de WWE y posteriormente. El demandante es un empleado de WWE que reclama que el dueño de la empresa eligió a modo a los votantes para que se confirmara su reinstauración luego de medio año de haberse hecho a un lado de la compañía.
Steven Muehlhausen de DAZN había confirmado ya la compra por parte del Fondo de Inversión Pública de Araba Saudita pero terminó por borrar el tweet en donde dio a conocer esta información que hasta el momento se mantiene como falsa. Según Ariel Helwani, reportero de la fuente, afirmó que WWE ‘continúa explorando todas las opciones disponibles’.
Otros reportes dieron a conocer la misma información, WWE está en venta pero no se ha cerrado aún nada con los árabes ni con otra gran compañía. Mientras tanto los rumores de cara a Royal Rumble han crecido de manera exponencial y es que se reporta que talento habría dado a conocer su intención de salir de la empresa en caso de llegar a las manos del Fondo de Inversión Pública de Araba Saudita.
