Después de disfrutar de una deliciosa comida, la última cosa que probablemente quieras hacer es ejercitarte. Sin embargo, sorprendentemente, caminar después de comer puede ofrecer numerosos beneficios para tu salud.
No se trata solo de mejorar tu estado de ánimo o reducir el estrés con un tranquilo paseo que estimula la serotonina.
La Dra. Heather Viola, médica de atención primaria de Mount Sinai Doctors-Ansonia, desglosa cinco razones clave por las cuales deberías considerar incorporar caminatas después de las comidas, ya sea después del desayuno, el almuerzo o la cena.
Mejora la digestión. La hinchazón, el estreñimiento, el reflujo ácido y el malestar estomacal son síntomas incómodos de la indigestión. Una forma efectiva de aliviar estos problemas es dar un breve paseo después de comer. La Dra. Viola explica que caminar estimula el movimiento del estómago e intestinos, favoreciendo una digestión más eficiente.
Reducción del riesgo de enfermedades cardíacas. La actividad física regular es un componente clave para la salud cardíaca. Numerosos estudios han demostrado que reduce la presión arterial, controla el colesterol y disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas, incluyendo ataques cardíacos y derrames cerebrales.
Además, investigaciones sugieren que breves caminatas de 10 a 15 minutos después de las comidas pueden ser particularmente efectivas para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Control de los niveles de azúcar en sangre. La inactividad después de comer puede provocar picos en los niveles de azúcar en sangre, aumentando el riesgo de resistencia a la insulina, prediabetes y diabetes tipo 2. Caminar después de comer ayuda a regular estos niveles, reduciendo los riesgos asociados.
Promoción de una pérdida de peso saludable. Para perder peso, debes quemar más calorías de las que consumes. Caminar es una forma efectiva de quemar calorías, lo que puede ayudarte a mantener o perder peso. Además, reduce el apetito, disminuyendo la tentación de consumir refrigerios poco saludables entre comidas.
Mejor sueño. Caminar después de la cena contribuye a regular los ritmos circadianos, mejorando el ciclo de sueño-vigilia del cuerpo. Esto facilita conciliar el sueño y disfrutar de un descanso más profundo y reparador. Además, al aliviar las molestias estomacales, se promueve un sueño más cómodo y continuo durante la noche.
Cuándo y cuánto caminar
No hay un momento específico para caminar después de comer, pero algunos estudios sugieren que inmediatamente después de la comida puede ser más beneficioso. Sin embargo, si sientes malestar estomacal, esperar unos 15 minutos puede ser útil.
En cuanto a la duración, una caminata de 10 minutos es suficiente para mejorar la digestión, mientras que caminar durante unos 30 minutos beneficia tu salud general y puede ayudarte a alcanzar tus objetivos de condición física.
