La primera ejecución tuvo lugar en diciembre pasado con el fusilamiento de un convicto por homicidio en la provincia occidental de Farah.
El gobierno de los talibanes llevó a cabo este martes la segunda ejecución pública que ha tenido lugar en Afganistán desde su regreso al poder en agosto de 2021 y ha fusilado a un reo condenado por homicidio.
El hombre ejecutado según el castigo por "retribución" de la ley islámica era un residente del distrito de Guldara, en la provincia de Kabul, acusado de asesinar a cuatro personas de la misma familia en la vecina provincia de Laghman.
La ejecución se llevó a cabo en un evento público en el que participaron varios dignatarios, incluyendo a un funcionario de alto rango de la Corte Suprema, Mufti Atiqullah Darwish, informaron las autoridades en un comunicado.
“El asesino convicto fue ejecutado a tiros ya que él asesinó de la misma manera”, dijo a EFE el portavoz del Supremo afgano, Malavi Mashal.
De acuerdo con el portavoz, esta es "la segunda Qesas" o "retribución" desde la llegada al poder de los talibanes, el 15 de agosto de 2021.
El Qesas es un término islámico que implica "ojo por ojo" o retribuir al criminal con el mismo daño causado, según lo cual si una persona es asesinada con un cuchillo, la retribución también se ejecutará con un cuchillo, o si asesinó con arma de fuego la persona condenada también será ejecutada por disparos.
