Ambos problemas, señalan expertos, podrían ser un riesgo crucial para desarrollar diversos problemas de salud, pero ¿sabes cuál es su distinción?
Las personas somos naturalmente consideradas seres sociales, y se ha observado que el contacto con otros puede ayudarnos a sobrevivir y estar bien. Sin embargo, aunque existen beneficios en relacionarnos, algunas personas tienen dificultades en hacerlo.
Se habla mucho sobre el hecho de que aquellos que tienen problemas para interactuar o que no lo hacen frecuentemente, pueden experimentar soledad o aislamiento social. Pero, ¿cuál es la diferencia entre estos términos? ¿No son lo mismo?
Al decir de los especialistas, la soledad y el aislamiento social, aunque en algunos casos se pueden confundir, no son idénticos. Sin embargo, ambos se consideran factores significativos de riesgo para desarrollar problemas, tanto de índole psicológica como física, como enfermedades cardíacas.
Ahora bien, ¿conoces la distinción entre la soledad y el aislamiento social? Permítenos explicártelo.
Estar socialmente conectado es muy importante
Se dice que el ser humano es, por naturaleza, un ser social, lo cual hace que sea casi instintivo buscar vivir y relacionarse con otros, formando parte de grupos sociales que evitan la vida en soledad.
De acuerdo con expertos, mantener conexiones sociales y pertenecer a grupos puede proporcionar al menos 5 beneficios significativos, tales como:
- Puede animarnos y ayudar a nuestro estado de ánimo, ayudando así a combatir la soledad.
- Nos proporcionan recursos, aprendizaje e información.
- Genera vínculos que actúan como un factor de protección.
- Puede reforzar la autoestima de forma importante gracias al sentido de pertenencia.
- Nos brinda modelos importantes a seguir.
¿Cuál es la diferencia entre soledad y aislamiento?
Generalmente, mucha gente piensa que la soledad y la falta de interacción social son idénticas o intercambiables, pero eso no es necesariamente cierto. Estas dos situaciones pueden ser experiencias separadas que no siempre van juntas, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
- La soledad se trata de un sentimiento. Es decir, ocurre cuando las personas, independientemente de si tienen o no vínculos sociales, llegan a sentirse solos.
- El aislamiento social ocurre cuando realmente existen faltas de conexiones sociales y la persona tiene contacto con pocas personas con las cuales interactuar regularmente.
Se ha observado, además, que el aislamiento social podría ser una causa importante de soledad en las personas, por lo que en muchas ocasiones estas dos condiciones suelen ir de la mano, aunque la soledad no siempre depende de una falta de vínculos sociales: también puede darse mientras se está con otras personas.
Los expertos dicen que, aunque todas las personas pueden estar en riesgo de desarrollar soledad y aislamiento social, son las personas mayores quienes tienen más probabilidades, ya que conforme se va envejeciendo, pueden irse perdiendo conexiones sociales.
Así afectan a la salud la soledad y el aislamiento
Pero la soledad y el aislamiento social no solo afectan nuestra habilidad social, sino que también pueden perjudicar la salud y aumentar el riesgo de muerte, según un estudio de la revista Nature Human Behaviour.
El estudio reveló un aumento del 14% en el riesgo de muerte por cualquier causa debido a la soledad, y un aumento del 32% debido al aislamiento social.
Además, según el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, la soledad y el aislamiento social pueden ser factores de riesgo significativos para el desarrollo de problemas como:
- Depresión y ansiedad.
- Deterioro cognitivo.
- Demencia, como el Alzheimer.
- Presión arterial alta.
- Enfermedades del corazón.
- Obesidad.
- Adicciones.
- Función inmunitaria débil.
- Problemas del sueño.
- Muerte.
