Tener várices no es motivo de vergüenza, nos pasa a todas y es algo normal. Las várices, en ocasiones, solo representan un problema estético, pero también pueden afectar la salud.
Las várices pueden causar dolor, hormigueo, pesadez, hinchazón y comezón en las piernas. Existen remedios caseros para aliviar estos síntomas, por eso es bueno incluir estos alimentos en tu dieta si tienes várices.
Aunque hay varios factores que pueden acelerar el desarrollo de várices en las piernas, una dieta saludable puede ayudar a aliviar los síntomas o prevenir su empeoramiento.
Si tienes várices, deberías incluir estos alimentos en tu dieta
Según Vein Clinic del Reino Unido y Medical News Today, estos alimentos son los mejores para prevenir el avance de tu problema venoso.
Vida saludable y visitas frecuentes al médico son importantes.
1. Aguacate
Este alimento querido te puede ayudar como un anticoagulante natural debido a su contenido de vitamina E, por lo tanto, es recomendado incluirlo en tu dieta.
2. Semillas
Las semillas son ideales para quienes padecen várices, ya que evitan la inflamación en todo el cuerpo, lo cual afecta tus piernas.
3. Betabel
Al tener betacianina, el betabel puede ayudar a depurar los vasos sanguíneos del colesterol, promoviendo la circulación. Por eso, es un alimento que debes añadir a tu dieta.
4. Fibra
Alimentos ricos en fibra previenen estreñimiento y benefician el sistema digestivo y el cuerpo en general. Se encuentran en avena, nueces, semillas y leguminosas.
5. Alimentos ricos de potasio
Si sufres de várices, consumir alimentos ricos en este elemento es aconsejable, ya que ayudan a reducir la retención de líquidos. Por ejemplo: patatas, verduras de hoja verde, atún, salmón, almendras y pistachos.
6. Jengibre
Actúa también como un antioxidante y antiinflamatorio natural, mejorando así la salud cardiovascular gracias a su contenido de fibrina, que favorece la coagulación de la sangre.
Lo recomendable es incorporar a tu dieta todo lo que contribuya a una circulación adecuada en tus venas.
Es posible complementar estos alimentos con otras medidas, como evitar el consumo excesivo de sal y practicar ejercicio como natación, yoga y ciclismo. Además, utilizar calcetas de compresión y elevar las piernas siempre que sea posible puede resultar beneficioso.
