Hassaf Tobías viola nuestro derecho de libre tránsito dentro de un área pública como es el relleno sanitario, se quejaron los pepenadores.
Saltillo, Coah. – Un grupo de 57 pepenadores del relleno sanitario, encabezados por su representante, José Cruz Chávez Castillo, acudieron a la Presidencia Municipal a pedir una solución al conflicto interno, y posible corrupción, ya que su sindicato les prohíbe ingresar a la pepena desde hace tres años, afectando a 50 familias.
El representante de los pepenadores reveló que se quedaron sin fuente de ingresos para el sustento familiar por la corrupción que hay en el lugar. El activista denunció que hay hechos de corrupción entre empleados municipales y la CROC: “el director de Servicios Primarios es Alejandro Hassaf Tobías y el regidor Alberto Morales Núñez y la diputada Luz Elena Morales Núñez”.
Mencionó, con documentos bajo su brazo, que esta problemática viene desde el 2019, pues inició cuando Manolo Jiménez era alcalde de Saltillo, y hasta hoy, a un año de haber iniciado José María Fraustro Siller, no han obtenido respuesta satisfactoria, “y pues seguimos aquí sin empleo”.
Reveló asimismo que la poca basura que se recolecta “es porque la fosa en uso llegó al límite de 700 toneladas y únicamente se depositan 100, lo cual repercute en todos los 500 pepenadores que laboran en el tiradero”.
El conflicto llamó la atención por el excesivo despliegue de elementos policiacos municipales que acudieron para preservar el orden de manera preventiva, unos 15 elementos llegaron en 6 patrullas para apostarse a la distancia del edificio donde estaban los aproximadamente 20 quejosos.
Chávez Castillo dio a conocer que una de las malas prácticas es el precio de compra de lo que obtienen de la pepena: “el representante de no asalariados de la CROC, Alberto Morales Núñez, les paga el kilogramo a precios irrisorios y como lo consideraron un robo, decidieron ya no venderle”.
“(Pero) inclusive, si Hassaf Tobías se llega a enterar que los pepenadores venden a otras personas a mejor precio, los sanciona y les prohíbe la entrada al tiradero municipal. Además de que, por la reducción de la basura del lugar, un pepenador trabaja sólo tres días a la semana, y obtiene 100 pesos diarios que le alcanzan para muy poco”.
“Y por esa explotación y maltrato de que somos presa, los 57 pepenadores decidimos salirnos de la CROC. Por ello exigimos sean respetados nuestros derechos y que nos dejen trabajar como antes, ya que la dirigente de la CROC en el Relleno, María del Carmen Molina Corral, es quien no nos permite hacerlo”, finalizó.
CUADRO DE DATOS
La fosa en uso llegó al límite de 700 toneladas y únicamente se depositan 100, lo cual repercute para los 500 pepenadores que laboran en el tiradero.
Un pepenador trabaja solo tres días a la semana en la pepena y el salario que obtiene son apenas 300 pesos.
