Las autoridades sanitarias de Estados Unidos han emitido una alerta crucial sobre los riesgos asociados con el uso de medicamentos recetados para la pérdida de peso y reducción de grasa corporal.
En particular, los fármacos Semaglutide, comercializado como Ozempic, han sido vinculados a un alarmante aumento del 1.500% en las llamadas a servicios de emergencia debido a intoxicaciones.
Desde el año 2019 hasta la fecha actual en 2023, el sector sanitario estadounidense ha registrado un aumento significativo en las llamadas de emergencia relacionadas con intoxicaciones causadas por el Semaglutide y el Ozempic.
Ambos medicamentos, ya sea en forma inyectable u oral, pueden provocar graves efectos secundarios, especialmente cuando se consumen en exceso, lo que resulta en intoxicaciones peligrosas.
En lo que va de 2023, se han contabilizado alrededor de 3000 llamadas a servicios de emergencia relacionadas con estos medicamentos en particular.
Las autoridades sanitarias instan a la población a ser consciente de estos riesgos y a evitar el abuso de estas sustancias para no contribuir a las alarmantes estadísticas de intoxicación.
Es crucial destacar que, aunque Semaglutide fue aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) en 2017, su uso bajo el nombre de Ozempic para perder peso ha experimentado un aumento significativo desde que algunas celebridades lo promocionaran en redes sociales en 2022.
Esta repentina demanda provocó escasez en marzo de 2022, llevando a ciertas farmacias a elaborar versiones compuestas para satisfacer la demanda.
Además, se ha observado que, incluso cuando se siguen las indicaciones médicas, estos medicamentos pueden causar efectos secundarios estomacales e intestinales, como náuseas, vómitos y estreñimiento. Las autoridades sanitarias subrayan la importancia de la moderación y la supervisión médica al utilizar estos fármacos para minimizar los riesgos asociados.
