La cafeína se encuentra presente en algunas bebidas como el café y el té principalmente. La preocupación de las personas que deben controlar su presión arterial alta es si el café podría alterar sus números.
De acuerdo al doctor Francisco López Jiménez, MD de Clínica Mayo, la cafeína o el café puede causar un aumento breve, pero drástico de la presión arterial, incluso en personas que no tienen presión arterial alta.
Esto se debe a que, según algunos investigadores, la cafeína podría bloquear una hormona que ayuda a mantener las arterias dilatadas. También se cree que la cafeína hace que las glándulas suprarrenales liberen más adrenalina, lo que hace que aumente la presión arterial.
Con el paso del tiempo y con el consumo habitual, algunas personas pueden desarrollar resistencia a la cafeína, en estas personas la sustancia no tiene efecto alguno sobre su presión arterial.
De acuerdo a la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) 400 mg de cafeína al día son inofensivos para la mayoría de las personas. Sin embargo, antes de consumir cafeína, debe preguntar al médico si es seguro cuando se tiene presión arterial alta.
Si le preocupa el efecto de la cafeína en su presión arterial, intente limitar la cantidad de cafeína que bebe a 200 miligramos por día, aproximadamente la misma cantidad que generalmente hay en dos tazas de 8 onzas (237 mililitros) de café preparado . Tenga en cuenta que la cantidad de cafeína en el café, las bebidas energéticas y otras bebidas varía según la marca y el método de preparación.
Además, si tiene presión arterial alta, evite la cafeína justo antes de las actividades que aumentan naturalmente su presión arterial, como el ejercicio, el levantamiento de pesas o el trabajo físico intenso.
Para ver si la cafeína podría estar elevando su presión arterial, controle su presión arterial antes de beber una taza de café u otra bebida con cafeína y nuevamente de 30 a 120 minutos después. Si su presión arterial aumenta entre 5 y 10 puntos, es posible que sea sensible a los efectos de la cafeína que aumentan la presión arterial. Si planea reducir el consumo de cafeína, hágalo gradualmente durante varios días a una semana para evitar los dolores de cabeza por abstinencia.
