A causa de la pirotécnica, en los municipios de Ahome y Mazatlán cuatro familias perdieron sus escasos bienes.
A causa de la pirotécnica, en los municipios de Ahome y Mazatlán cuatro familias perdieron sus escasos bienes y vieron en riesgo la vida de menores de edad, al incendiarse sus viviendas construidas con madera y láminas de cartón, sobre las que explotaron artefactos elaborados con pólvora.
En el ejido 20 de Noviembre, del municipio de Ahome, la señora María “N” que se encontraba en la calle con una de sus pequeñas nietas para observar las luces de las detonaciones de la piratería que se inició poco antes de la Nochebuena, de pronto escuchó que uno de los estruendos fue muy cerca del techo de su casa construida con láminas de cartón.
La mujer mandó a su nieta a ver si el más pequeño de sus nietos que estaba dormido, con la explosión no había despertado, pero esta regresó para avisarle que la casa se estaba quemando, por lo que corrió a rescatar al niño de solo un año de edad.
Las afectadas por el juego de pirotecnia solicitaron al presidente municipal de Ahome, Gerardo Vargas Landeros y a la comunidad apoyo para reconstruir sus viviendas con madera y láminas de cartón y obtener ropa para sus nietos pequeños, puesto que quedaron en la calle.
En una invasión del Rincón de Urías, en Mazatlán, se registró un hecho similar, dos viviendas levantadas con madera y láminas de cartón fueron consumidas por el fuego que fue provocado por la caída de pirotecnia, sin que se reportaran personas lesionadas.
Los cuerpos de auxilio fueron alertados durante los festejos de Nochebuena que sobre la calle Venus, de dicho asentamiento irregular, se había registrado un incendio que pronto se propago a causa de las detonaciones de toda clase de pirotecnia.
