La Asociación Mundial para la Investigación y el Desarrollo de Antibióticos (GARDP), una destacada organización sin fines de lucro con sede en Suiza, anunció un hito revolucionario en la lucha contra la gonorrea o blenorragia.
En un comunicado emitido este miércoles, se revelaron resultados exitosos en el ensayo clínico de fase III de un antibiótico oral, que se presenta como el primero de su clase para tratar esta enfermedad de transmisión íntima.
El ensayo clínico, realizado en colaboración con la firma estadounidense Innoviva Specialty Therapeutics, especializada en terapias innovadoras para enfermedades infecciosas, involucró a un impresionante grupo de 930 pacientes con gonorrea no complicada. Este estudio se erige como el ensayo clínico más amplio jamás realizado para evaluar un nuevo tratamiento para esta afección.
Los investigadores han demostrado que la administración oral del antibiótico zoliflodacina logró un control microbiológico de la peligrosa "Neisseria gonorrhoeae", la bacteria responsable de la infección, equiparable o incluso superior al alcanzado con el tratamiento estándar que involucra inyecciones intramusculares de ceftriaxona o la administración oral de azitromicina.
Lo más alentador es que la zoliflodacina fue generalmente bien tolerada por los pacientes, y en el transcurso del ensayo no se registraron eventos adversos graves ni muertes. Si este tratamiento recibe la aprobación final, marcará un hito significativo, siendo el primer antibiótico nuevo en décadas para combatir la gonorrea.
En palabras de Manica Balasegaram, director ejecutivo de GARDP, "a pesar del altísimo valor para la salud pública, ha faltado inversión para desarrollar nuevos medicamentos para la gonorrea.
Este programa de zoliflodacina demuestra que es posible desarrollar tratamientos con antibióticos dirigidos a bacterias multirresistentes que representan la mayor amenaza para la salud pública y que de otro modo no se desarrollarían".
El funcionamiento del fármaco es notable, ya que la zoliflodacina inhibe una enzima bacteriana clave, la topoisomerasa tipo II, esencial para la función y reproducción de las bacterias.
Estudios in vitro han demostrado que este antibiótico es activo incluso contra cepas de 'N. gonorrhoeae' resistentes a múltiples fármacos. De manera sorprendente, las cepas que muestran resistencia a la ceftriaxona y a la azitromicina son sensibles a este antimicrobiano. Además, su mecanismo de acción es único y no genera resistencia cruzada con otros antibióticos.
El doctor Edward W. Hook III, líder del protocolo del estudio, destacó que "El resultado de este estudio es un posible punto de inflexión para la salud sexual", según declaró para RT.
La gonorrea, la tercera infección de transmisión íntima más común en el mundo, afecta a millones de personas anualmente, tanto hombres como mujeres, en ocasiones con formas graves que pueden tener consecuencias permanentes para la salud. La administración de ceftriaxona en una única inyección intramuscular se había convertido en la última línea de tratamiento recomendada a nivel global.
El éxito de este estudio podría tener un impacto profundo en la forma en que los médicos abordan las infecciones por gonorrea, al proporcionar una alternativa oral a la inyección, lo que mejoraría el acceso y el cumplimiento del paciente.
Además, contribuiría a reducir la propagación de cepas de la enfermedad resistentes a los antibióticos, según señaló Pavel Raifeld, director ejecutivo de Innoviva, Inc. Este avance promete mejorar significativamente la atención de salud íntima en todo el mundo.
