Tres personas murieron y otras cuatro resultaron heridas en un tiroteo en una casa de alquiler a corto plazo en un exclusivo vecindario de Los Ángeles la madrugada del sábado, dijo la Policía. El tiroteo ocurrió alrededor de las 2:30 am en el vecindario de Beverly Crest. Éste es al menos el sexto tiroteo masivo en California este mes. El sargento Frank Preciado, del Departamento de Policía de Los Ángeles, dijo el sábado que las tres personas muertas estaban dentro de un vehículo.
Dos de las cuatro víctimas lesionadas fueron llevadas en vehículos privados a hospitales del área y otras dos fueron transportadas en ambulancia, dijo el sargento vocero de la Policía, Bruce Borihanh. Dos se encontraban en estado crítico y dos en condición estable, dijo Borihanh. Las edades y géneros de las víctimas no fueron revelados de inmediato. Los investigadores estaban tratando de determinar si había una fiesta en la casa de alquiler o qué tipo de reunión se estaba realizando, dijo Borihanh.
Borihanh agregó que la Policía no tiene información sobre los sospechosos. La casa de mediados de siglo está en Beverly Crest, un vecindario tranquilo ubicado en las montañas de Santa Mónica, donde las residencias son grandes y caras. La propiedad, estimada en $3 millones, se encuentra en una calle sin salida y se describe en las plataformas de bienes raíces en línea como moderna y privada con piscina y ducha al aire libre. El tiroteo del sábado se suma a otro más como la masacre de la semana pasada en un salón de baile en un suburbio de Los Ángeles, donde murieron 11 personas y nueve resultaron lesionadas, así como tiroteos en dos granjas Half Moon Bay que dejaron siete muertos y un herido.
11 personas murieron y 9 heridos. El sábado pasado, Huu Can Tran, de 72 años, baleó a quienes se encontraban en un salón de baile en Monterey Park, mayoritariamente asiático, en donde decenas de miles de personas asistían esa tarde a las festividades del Año Nuevo Lunar. Después condujo a otro salón de baile, donde un empleado impidió el ataque. Muchos de los muertos tenían alrededor de 60 y 70 años.
