A la incertidumbre salarial y laboral de casi 10 mil trabajadores de Altos Hornos, se suma la incertidumbre médica de otros 851 obreros y sus familias.
Saltillo, MÁS. – Por lo menos 851 trabajadores de las tres plantas filiales de Altos Hornos de México fueron dados de baja antes del 21 de julio, confirmó el Instituto Mexicano del Seguro Social, por lo que no están en posibilidades de recibir atención médica.
Este fin de semana, el IMSS dio a conocer la información en la que especificó que se trata de las empresas Antair SA de CV, Resguardo Corporativo SA de CV y Forjacero SA de CV, filiales del Grupo Acerero del Norte, antes AHMSA.
Antes, la acerera a través de su dirección corporativa de recursos humanos se refirió sobre el retiro de los derechos asistenciales del personal de dichas fábricas.
Sin embargo, el instituto de la salud de los trabajadores en el país, que asegura ser garante de “los servicios a la población derechohabiente de esta entidad”, informó que, según los registros de su Departamento de Afiliación, hasta el 8 de junio, Forjacero contaba con 504 trabajadores cotizando en el IMSS.
Pero al día siguiente se tramitó su baja debido a un procedimiento irregular en el que se trató de registrarlos como trabajadores de AHMSA, además, en fechas recientes la empresa reingresó a cuatro trabajadores cuyos derechos seguían vigentes hasta el pasado 19 de julio.
A su vez, Resguardo Corporativo contaba con 297 cotizantes, mientras que Antair tenía 50 trabajadores registrados, ambas al 19 de julio de este año.
Para el último trimestre del 2022. AHMSA se declaró en insolvencia económica, más no en quiebra, según datos del Gobierno de la 4T, inclusive el Ejecutivo Federal informó que la acerera arrastraba millonarios adeudos con la Comisión Federal de Electricidad, con Petróleos Mexicanos, con el Seguro Social y con el Servicio de Administración Tributaria.
Solo a la CFE le debía poco más de 150 millones de pesos y analistas dieron a conocer recientemente que la deuda con el Seguro Social oscilaba en los mil 500 millones de pesos.
Además de que se cumplen más de 10 semanas de que los trabajadores no reciben su paga y que el golpe llega ahora por el servicio médico, el IMSS continúa: “el 6 de junio representantes del IMSS verificaron que en el domicilio proporcionado por el patrón de estas empresas no existen bienes susceptibles de embargo y tampoco se observó actividad administrativa por lo que, en apego a la normatividad vigente, se operaron las bajas de los registros patronales el pasado 19 de julio”.“Los trabajadores que hayan laborado durante ocho semanas continuas previas a su baja, cuentan por ley con una conservación de derechos médicos de 56 días naturales a partir de la fecha de su baja”.
