El 40 % de los casos se detectan en la primera etapa de la leucemia, sin embargo, el 60% ya se encuentra en una segunda o tercera
El cáncer de mama sigue llevándose la vida de decenas de mujeres que por temor no se realizan chequeos y por ende no son diagnosticadas a tiempo, además se han presentado en la región casos de mujeres cada vez más jóvenes desde los 22 años de edad, así lo informó el oncólogo Pablo Garza quien se desempeña en el Seguro Social y de manera particular.
El oncólogo aseveró que el 40 % de los casos se detectan en la primera etapa de la leucemia, sin embargo, el 60% ya se encuentra en una segunda o tercera de gran avance e invasión que les cuesta la vida.
Aún existe miedo, incertidumbre e incredulidad, pues las pacientes no creen que puedan tener cáncer de mamá, “se detectan la bolita y no acuden por vergüenza, temor, cuestiones culturales, dicen al rato se me quita o es un absceso y ya no van” expresó el médico.
Al mismo tiempo de la falta de preparación o especialización del doctor en algunos casos, ya que existen quienes no lo diagnostican a tiempo basándose en que es un quiste y se confían en que es algo benigno, pero no realizaron los estudios pertinentes y por ende la enfermedad va arrasando con el cuerpo.
“En lo que se hacen exámenes o pruebas se deterioran aún más y por eso ya no les da tiempo de recibir la atención que necesitaban” expresó.
Es por ello que el médico invitó a las mujeres en no caer en la confianza y pensar que todo está bien, sino, cuestionarse por las señales que el cáncer les puede dar como síntomas de fatigas exhaustivas de la nada, demasiada sudoración durmiendo o con altas fiebres sin presentar algún problema de infección, entre otros, pero el más importante es sentirse alguna bolita hasta como un barrito puede llegar a ser un tumor que crece en el seno y si no se atiende dejará severas consecuencias.
“Por la edad dicen no creo que sea un cáncer a los 30 y ya no se hacen más seguimiento, pero no es así deben checarse”.
