En una de las noches más frías del año en Montevideo, los fanáticos uruguayos colmaron el mítico estadio Centenario para observar el debut de Marcelo Bielsa en el renovado combinado nacional, que goleó 4-1 a Nicaragua en un amistoso internacional correspondiente a la fecha FIFA.
Con el gesto adusto, camperón oscuro, mirada penetrante y los brazos detrás de su espalda, el Loco tuvo su primera escena antes de que la pelota comenzara a rodar por el escenario que albergó a la Copa del Mundo de 1930. A diferencia de su tradicional línea de tres que impuso en equipos como el Athletic de Bilbao, Chile, Argentina, Leeds United, Olympique de Marsella o Lille, el estratega rosarino planteó para su compromiso con la Celeste una línea de cuatro compuesta por Guillermo Varela, Sebastián Cáceres, Matias Viña y Lucas Olaza.
El ex lateral de Boca fue el encargado de generar la primera ocasión con la ejecución de un tiro libre peligroso que se fue cerca del ángulo superior izquierdo del arco defendido por Miguel Rodríguez. Y unos instantes después, la triangulación ofensiva interpretada por Rodrigo Zalazar, Facundo Pellistri y Douglas Arezo derivó en el primer tanto charrúa con el sello bielsista. En 8 minutos, el conjunto local ya demostraba que era muy superior a su rival.
Antes de llegar a la media hora, Marvin David Fletes se llevó por delante a Maximiliano Araujo y Wagner Do Nascimento Magalhaes no lo dudó: penal. Desde los doce pasos, Douglas Arezo tocó suave y desperdició la chance de ampliar la diferencia, dado que el arquero, con ayuda del palo, desactivó el peligro con una gran atajada.
