El internacional belga Dodi Lukébakio lideró la goleada del Sevilla (5-1) en un partido en el que los hispalenses jugaron su mejor fútbol de la temporada. Los locales se fueron al descanso con un contundente 3-0 y pudieron marcar aún más goles en la segunda parte. El Almería, por su parte, se vio superado en todo momento y está cada vez más hundido en la tabla.
La jornada séptima se abrió con un partido entre dos equipos con muchas ganas de ganar, que venían de jugar el pasado sábado y firmar empates que convencieron algo mas por el juego que por el punto sumado, ya que les mantenía en la zona baja de la tabla, el sevillano al borde de los puestos de descenso y al almeriense colista y como el único de la categoría que aún no ha ganado.
El entrenador de los locales, José Luis Mendilibar, volvió a rotar mucho para distribuir los minutos en este programa saturado entre LaLiga y la 'Champions' y así el lateral derecho Jesús Navas fue una de las seis novedades, tras perderse el anterior en el calentamiento de El Sadar (0-0), mientras que el central Sergio Ramos se quedó suplente después de haber sido baja también en Pamplona, éste por una sobrecarga.
Vicente Moreno, por su parte, introdujo cuatro variaciones respecto al once que empató 2-2 en casa ante el Valencia, con la entrada, aparte del delantero malí Ibrahima Koné, del exsevillista Alejandro Pozo y Álex Centelles en los laterales; y del medio ghanés Iddrisu Babá; en detrimento de Chumi, Akieme, el argentino Robertone y Adri Embarba.
Con esos hombres el Almería salió dispuesto, bien situado, con ganas de balón y encima del rival en la presión y eso le dio para que el Sevilla estuviera casi sin pisar el campo del adversario en los primeros cinco minutos, pero cuando lo hizo fue letal.
Los locales cruzaron el campo y forzaron un primer córner, que sacó Suso Fernández, lo cabeceó a la escuadra el francés Loïc Badé y Youssef En-Nesyri, también de cabeza, remachó a gol poco antes de cumplirse los siete minutos, con lo que el punta marroquí sumó su segundo de este curso en LaLiga.
Pero la efectividad hispalense fue del cien por cien cuando un minuto después Lukébakio se montó una gran jugada personal con varios quiebros que acabó con un zapatazo con la derecha que se coló por la escuadra, también su segundo en esta campaña de su debut como sevillista.
Esos dos lances y el 2-0 rompió todo lo planificado por Vicente Moreno y los de Mendilibar quisieron aprovecharse de la desorientación del Almería para que se viera un carrusel de ataques por las dos bandas y continuas ocasiones de gol, algunas muy claras como un cabezazo del argentino Erik Lamela o un remate acrobático de Lukébakio.
Lo que se veía venir tardó algo, pero llegó, en la clásica acción de Suso de recortes al borde del área y remate con rosca con la zurda imposible en esta ocasión para el meta portugués Luís Maximiano, un tanto que llegó a los 38 minutos y que dejó un 3-0 al descanso, resultado que incluso pudo ser algo mas amplio.
Mucho tuvo que hablar el técnico valenciano en el vestuario para cambiar la dinámica en la segunda parte y así se vio a un Almería con ganas de adelantar líneas pero, como en la primera, los locales montaron una primera contra protagonizada otra vez por Lukébakio que acabó con gol de Lamela.
Incluso el centrocampista internacional belga marcó otro gol pero fue anulado por una falta previa, aunque después vino un penalti de Jesús Navas sobre el belga Largie Ramazani y el colombiano lo transformó en el 4-1, marcando el primer de su cuenta personal esta campaña ante el meta noruego Orjan Nyland, quien este martes volvió a repetir titularidad en detrimento del serbio Marko Dmitrovic.
El tanto almeriense llegó en el minuto 71, con mucho partido por delante, pero la reacción visitante no llegó y sí el redondeo de la goleada por parte de los locales, cuando ya en la prolongación el canterano Kike Salas marcó un buen tanto en su estreno como goleador en el primer equipo.
