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La Entrevista con Perla Hernández

La Entrevista con Perla Hernández
Mariaclara Delgado / El Tiempo de Monclova
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'La vida finalmente termina acomodando las cosas en su lugar'. 

Ser periodista es tener el privilegio de cambiar algo todos los días, como bien lo expresó Gabriel García Márquez alguna vez. En esta ocasión Perla Yadhira Hernández Gallegos, es una de las comunicólogas, periodista, fotógrafa, que tiene el privilegio de cambiar un algo un poquito cada día, o mostrándonos como ve el mundo a través del lente y sus fotografías. 

¿Cuál es tu Profesión y qué te inspiró a dedicarte a eso?

"Soy comunicóloga. Me inspiró entrar a la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la UA de C en Saltillo, el hecho que desde niña me gustaban mucho los micrófonos, cantar y hacer imitaciones y espectáculos de artistas, la actuación, la música, el cine, la televisión. Ya en la Preparatoria me surgió el gusto por ser locutora de radio (a los 17 años hice prácticas en una estación de radio en Monclova, donde estuve frente a micrófono, operando cabina y grabando comerciales, etc.), y también mi sueño era ser directora de cine".

¿Cuál ha sido tu mejor experiencia laboralmente?

"Cuando tenía 20 años y aún estudiaba la carrera hice prácticas en el periódico El Tiempo de Monclova durante las vacaciones de verano, donde tuve contacto por primera vez con el periodismo y me enamoré del oficio. Ahí viví algunas de mis mejores experiencias, porque reporteaba a pie, bajo el sol y calor de Monclova en plena Canícula y sin saber mucho de política ni de reportear; aprendí mucho. En Castaños (de donde soy originaria) no se vendía en ese entonces El Tiempo, hubo un periodo político de mucha efervescencia en el municipio y como cubría la fuente, al día siguiente alguien del pueblo traía el diario de Monclova para venderlo en Castaños, con mis notas a ocho columnas. Sentí mucha satisfacción y orgullo. Otra experiencia grata fue cuando fui a buscar a un funcionario de la Secretaría de Salud del estado (ya había egresado de la Universidad y trabajaba en una agencia de información en Saltillo) y me pasa a su oficina y sale un momento. Me quedé sola frente a su escritorio y empecé a leer (al revés) un documento que estaba ahí; me interesó el contenido, lo tomé para leerlo bien. Hablaba del arsénico en el agua de Torreón y coloqué rápido el documento en su lugar. Llega el funcionario y ¡obviamente le pregunté del tema! como no sabiendo. Saqué la nota y aunque la publicaron en interiores, me atrevería a decir que fue la primera noticia de ese tema en Saltillo. Ese asunto se convirtió en un grave problema de salud en Torreón y durante años ha estado vigente en aquella ciudad. Recomendación para funcionarios: no dejen documentos importantes en su escritorio cuando reciban a la prensa (tenemos capacidad para leer al revés jajajaja).
Una experiencia inolvidable también, fue la cobertura periodística (foto y crónica) de la misa de cuerpo presente y cortejo fúnebre en Monterrey del cantante de música colombiana Celso Piña. La misa fue en el Santuario de Guadalupe en la colonia Independencia, el barrio bravo del Rebelde del Acordeón, así que había una multitud para despedirlo. Tomé muchas fotos, entrevisté a una de sus hermanas y a amigos y conocidos. Tocó un grupo en vivo los éxitos de Celso y reinaba un ambiente de música, nostalgia y tristeza en el adiós a un ídolo del pueblo. Me gustan sus canciones. El cortejo fue seguido por decenas de personas bajo un ardiente sol de unos 35 grados centígrados, las calles por donde transitaba la carroza la gente salía con sus bocinas y tocaba las rolas de Celso Piña; otros lloraban al paso, incluidos hombres. La piel se me ponía ‘chinita’ con las emociones de sus fanáticos y la música. Caminamos todos hasta el Cerro de la Campana, donde Celso nació y creció. Fue una experiencia increíble y única. Escribí una crónica para la revista Espacio 4, en la que colaboro desde el 2013".

¿Ha sido difícil abrirte paso en este ámbito?  

"No me quejo. He tenido buenas oportunidades. Tengo la convicción de que el trabajo, la capacidad para redactar, creatividad, esfuerzo y responsabilidad es tu mejor carta de presentación y de recomendación. A base de todo ello me he abierto camino desde mediados de los 90’s en el apasionante oficio del periodismo en diferentes medios de comunicación en Saltillo; actualmente trabajo en el área de Comunicación Social del sector público, pero sigo colaborando con la revista Espacio 4 con artículos, crónicas, fotorreportajes, entrevistas, cuentos, relatos, prosa poética. Me mantengo vigente en el medio".

¿Cuál crees que ha sido tu mayor éxito?

"Haber llegado a donde estoy, sin más recomendación que mi trabajo. Provengo de una familia humilde y a base de resultados he salido adelante, con importantes oportunidades en el ámbito profesional".

¿Cuál es tu consejo para las nuevas generaciones?

"Que empiecen desde abajo, conozcan, exploren, aprendan y crezcan. Cuando se viven procesos desde la base, aunque no se perciban grandes sueldos, se logra mucho aprendizaje, experiencia y ‘colmillo’, y eso en algún momento de la vida te será de gran provecho y ventaja sobre otros. Alcanzar metas o logros no se da de la noche a la mañana, es un proceso y si te aplicas bien, la evolución personal y profesional será positiva y el aprendizaje será enriquecedor. Para recibir un buen sueldo hay que ganárnoslo, al menos que seas hijo, primo o pariente de alguien con el poder de darte un buen empleo y salario sin que domines el área o sin experiencia. Porque el conocimiento, talento, capacidad y otras cualidades no lo pagan ni los más altos salarios, eso queda saldado como una satisfacción personal".

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