El presidente Andrés López Obrador se empeña hasta el final a tratar de desaparecer a Altos Hornos, por una obstinación contra Alonso Ancira Elizondo.
El gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís señaló que la federación sigue sin medir las consecuencias del conflicto con AHMSA en el afán de "desaparecerla", pues "hasta para quebrar una empresa hay procedimientos". "Yo creo que no midieron lo que podía pasar, siguen sin medirlo, porque no veo un estudio real de lo que están haciendo; un gobierno ordenado, hasta para quebrar una empresa hay procedimientos y no lo están haciendo”, sostuvo.
Obstinación. Dijo que él ya no hablaría con el Presidente AMLO, sino que le corresponderá a Manolo Jiménez, sin embargo, pudiera ser inútil, pues lo que siempre indica en Las Mañaneras es querer afectar a Coahuila y desaparecer la empresa. Repitió lo dicho el lunes pasado de que el gobierno federal "ha estado asfixiando" a la acerera y se ven las consecuencias de tipo social, problemas de salud y de carácter psicológico de los trabajadores y acreedores, además de la afectación económica a las regiones, por lo que deberían acelerar todos los procesos de las negociaciones entre el grupo industrial y la federación para que AHMSA reactive sus actividades y no se sigan perdiendo los activos de la empresa.
Culpables. "Me voy a retirar del cargo sin entender esta decisión (bronca personal de AMLO con Ancira) y que afectó a Coahuila", por culpa de la federación, expresó el gobernador.
Deuda. Reconoció que Altos Hornos también debe al gobierno, a la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento más de 250 millones de pesos más ISN, pero no emprenderán acciones legales que contribuyan a agonizar a la empresa.
