La alimentación y la salud están intrínsecamente relacionadas, y cada vez más personas prestan atención a lo que ponen en sus platos. En este contexto, el huevo, a menudo incomprendido por su contenido de colesterol, está emergiendo como una fuente rica en nutrientes, grasas beneficiosas y proteínas de alta calidad.
"Un plan de alimentación saludable debe proporcionar al cuerpo la energía y los nutrientes necesarios todos los días", enfatiza MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Los huevos, que alguna vez se consideraron perjudiciales, se están reevaluando como una opción valiosa para la cena.
De acuerdo con el portal El Mundo, se pueden comer de 3 a 4 huevos diarios si una persona es sana y se realiza ejercicio de manera adecuada o incluso más. Las mujeres podrían comer menos en un promedio de 1 a 2. Además, el consumo de huevo se debe evitar en personas que han tenido enfermedades quísticas, como de ovario o de mama"
La investigadora Catherine J. Andersen, del Departamento de Ciencias Nutricionales de la Universidad de Connecticut (EE. UU.), realizó un estudio exhaustivo para determinar cuántos huevos se pueden consumir al día sin comprometer la salud.
En su investigación, se compararon los efectos de tres dietas diferentes: una sin huevos, otra con tres claras de huevo al día y la tercera con tres huevos enteros al día, durante un período de cuatro semanas. Los resultados arrojaron datos interesantes.
El consumo de huevos enteros mejoró la densidad de nutrientes de la dieta, aumentando los niveles de colina, perfiles de lipoproteínas de alta densidad (HDL) y aminoácidos en sangre relacionados con el riesgo de diabetes tipo 2, así como el hematocrito y el recuento de plaquetas.
Tanto las claras como las yemas proporcionaron proteínas de alto valor biológico y vitaminas B. Sin embargo, las yemas se destacaron como una fuente adicional de glicerofosfato, colina, esfingolípidos y ácidos grasos esenciales.
El estudio también reveló que el consumo de claras de huevo podría estar relacionado con peores perfiles de aminoácidos en sangre, indicativos de un mayor riesgo de diabetes tipo 2.
Además, el consumo de huevos enteros mejoró la calidad de micronutrientes en la dieta, así como los niveles de colina y perfiles hematológicos y de HDL, aunque ligeramente afectó los marcadores de resistencia a la insulina en comparación con las claras.
Es fundamental destacar que, como siempre, se recomienda consultar a un médico o nutricionista, especialmente si se tienen condiciones de salud preexistentes, como hipertensión u obesidad.
Un aspecto interesante del estudio es que la mitad de las mujeres participantes tomaba anticonceptivos orales combinados.
Los resultados mostraron que las mujeres que no tomaban la píldora experimentaron mayores aumentos en la proporción entre el colesterol total y el HDL, un factor de riesgo para enfermedades cardíacas. Sorprendentemente, los anticonceptivos parecían tener un efecto protector en respuesta al consumo de huevos.
Los beneficios de consumir huevos en la cena van más allá de la salud. Se ha demostrado que los huevos son un alimento altamente saciante, lo que puede prevenir los atracones nocturnos. Además, ayudan a mantener estables los niveles de azúcar en la sangre durante la noche, regulando la glucosa y la hormona del estrés.
Los huevos también son una fuente de proteínas de alta calidad, vitaminas y minerales, que pueden prevenir enfermedades oculares, favorecer el desarrollo cerebral y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares al elevar el colesterol bueno y disminuir el malo.
