'Los niños son el regalo más grande en la vida”.
Con más de 50 años de trayectoria a través de la docencia, la profesora Blanca Rosa del Campo Farias, quien es conocida por haber sido una de las primeras maestras en establecerse dentro del jardín de niños Severino Calderón, nos relata su paso por esta labor en la que ha demostrado el gran amor que tiene a su carrera y a los niños, a quienes señala como seres invaluables por los cuales se debe luchar.
Maestra platiquemos un poco ¿Cómo fue que decidió iniciar sus estudios en la docencia?
"Cuando estuve en la época en la que debía decidir se seguía mis estudios, mi preparación, la única oportunidad que tenía, en ese entonces, era la de estudiar en la Normal, que en ese tiempo había en la ciudad de Sabinas y afortunadamente ingresé, pero por fortuna mía, al comenzar con los estudios, al ya tener un acercamiento con las escuelas, sentí ese llamado de la profesión de que era la que debía tomar, teniendo ya más de 50 años ejerciéndola".
En esos años, ¿Tuvo alguna experiencia que le haya marcado su carrera o que le dejara una huella?
"Yo comencé trabajando en la educación primaria, pero a mí me llamaba la educación preescolar y cuando en su momento tuve la oportunidad de pasar a Educadora, no lo dude, aún y cuando muchas personas cercanas me decían que no lo hiciera, pues incluso me decían que hacerlo era un retroceso, pues si ya estaba dando clases en primaria para que perdiera el ritmo, pero yo sentí esa necesidad y gusto por ser Educadora, sentí que ese era mi camino y afortunadamente hubo esa oportunidad y hasta la fecha no me arrepiento de nada, del haber tomado esa decisión, pues he disfrutado mucho mi profesión, la he vivido, el convivir y trabajar con los niños de preescolar nos da vida, pues son niños que llegan con toda la ingenuidad, el cariño, la confianza, se convierten, durante el año que nos toca educarlos, en nuestros niños, todos decimos "mis niños para acá, mis niños para allá" pues en cierta forma nos apropiamos de ellos, entonces ellos son los que brindan muchas experiencias significativas para nosotros".
En los niños de preescolar, ¿Es la mejor edad para darles una buena educación?
"La edad de nuestros alumnos es la más específica para la formación del resto de su vida, pues en esos años que están con nosotros son las situaciones claves para el desarrollo de su vida, por lo que es un compromiso grande que tenemos con ellos".
Maestra, ¿Cómo fue su transición de ser Educadora a ser coordinadora de la zona preescolar?
"Toda etapa tiene su lado amable, bueno, interesante, pero no puede uno dejar de reconocer que el tiempo que vive uno cerca de los niños es el período más interesante y más feliz de nuestra profesión, porque el trabajar con ellos es tener una gama de oportunidades tremendas y conforme vamos pasando de dejar de ser maestros para ser directivos, supervisores y más vemos que es distinto definitivamente el trabajar con niños que con adultos, pues nosotros traemos otras cargas".
¿Cumplió todas sus expectativas el haber trabajado con niños?
"Claro que sí, disfruto estar en mi centro de trabajo, pero siempre están presentes ellos porque nos dejan experiencias muy enriquecedoras, por lo que no podemos dejarlos a un lado, siempre van a estar con nosotros".
Habla con mucho amor por los niños maestra, ¿Qué mensaje les da a los papás para que cuiden ese gran tesoro que tienen en su hogar?
"Eso sería, que los cuiden y que aprendan a valorar ese tesoro tan grande que tienen, pues es el mayor regalo que pueden tener en su vida y si lo saben apoyar, conducir y prepararlos para su vida, la satisfacción va a ser muy grande, pero recordando también que si no tenemos una conducta positiva hacia ellos los vamos a marcar para toda la vida, por ello es mejor ver que algo bueno quedo en ellos".
