Una fuente cercana al Pontífice reveló detalles sobre su hospitalización
A finales de marzo se conoció que el papa Francisco estuvo internado en el hospital Gemelli de Roma después de haber sufrido una infección respiratoria y un malestar cardíaco.
La noticia no tuvo mayor revuelo, pues no surgieron mayores alertas sobre la salud del Pontífice; sin embargo, después de varios días se conoció que la situación sí fue realmente grave. De acuerdo con el relato de Michele Ferri, amigo del papa, Francisco pudo haber muerto.
Según informaron fuentes del Vaticano, el Papa fue al hospital debido a un chequeo que ya estaba programado con anterioridad. No obstante, los medios italianos y argentinos informaron que había algo raro en el internamiento.
Fuentes del Vaticano dijeron al diario argentino La Nación que se trataba de un malestar imprevisto en el corazón.
Así mismo, El Corriere della Sera indicó que fuentes del Gemelli hicieron saber que el papa “tuvo problemas cardíacos al final de la mañana y que por seguridad fue llevado para controles en el departamento de cardiología”. Algunos otros medios italianos señalaron que salió en ambulancia y canceló las audiencias que tenía previstas.
"Nos diste un susto"
Michele Ferri, amigo del Papa, describió el suceso en una llamada telefónica al diario Il Resto del Carlino."Unas pocas horas más y no estoy seguro de que hubiera estado presente para contarlo”, reveló Ferri.
De acuerdo con su relato, el Papa podría haber muerto. De hecho, señaló que el pontífice les dio un tremendo susto. No obstante, tras la internación, el Vaticano informó que los estudios hechos al jerarca no revelaban motivo alguno de preocupación. El pasado sábado, Francisco recibió el alta médica y retomó sus labores ministeriales.
"Aún estoy vivo", dijo bromeando el Pontífice argentino a los fieles y periodistas congregados frente al hospital Gemelli de Roma cuando fue dado de alta.
