El Manchester United afronta este final de temporada con el objetivo de asegurarse un puesto entre los 4 primeros que le asegure el acceso a la próxima edición de la Champions League y le permita ofrecer un proyecto atractivo para rearmarse en verano con fichajes que le permitan aspirar a todos los títulos. Actualmente va cuarto en la tabla con 66 puntos y uno por encima del Liverpool, el cual va quinto con un partido más.
Más allá del final de campaña, la secretaría técnica 'red devil' ya está trabajando en reforzar la plantilla y en satisfacer las peticiones de Erik ten Hag, conscientes de que con el equipo actual no da para competir con equipos como el Manchester City. Y para apuntalar el equipo, han puesto la mira en el Nápoles, que ha ganado el Scudetto jugando un gran fútbol y que tiene a sus estrellas con salarios asumibles.
Su primera prioridad es el zaguero surcoreano de 27 años, Kim Min-jae, que llegó el pasado verano procedente del Fenerbahçe por 18 millones y que se ha revalorizado y de que manera, convirtiéndose en un absoluto pilar para Spalletti y disputando 43 partidos. Para fortuna de los ingleses el central tiene una cláusula que le permite salir por 50 millones, que evitará que sea necesario negociar con el conjunto 'partenopeo'. Además, la prensa italiana añade que el jugador ya habría acordado un salario de 13 millones con el club 'mancuniano'.
Informa 'Mirror' que el otro objetivo en el Nápoles no es otro que su 'killer' y estrella, Victor Osimhen. El delantero nigeriano de 24 años es el nueve más codiciado de Europa y ha sido fundamental para la consecución de la Serie A con sus 23 goles en el campeonato, que se suman a sus otros 5 tantos en la Liga de Campeones. A diferencia de Kim, su salida no se antoja nada sencilla, ya que De Laurentiis le ha tasado en 160 millones y tiene fama de duro negociador.
