Esta pequeña historia revela el lado más humano y humorístico de la relación entre los actores y los directores en el set.
El éxito de "Oppenheimer", dirigida por Christopher Nolan, ha sido notable en las taquillas de todo el mundo. En menos de un mes desde su estreno, la película ha recaudado más de 229 millones de dólares, con casi un tercio de esa cifra proveniente de Estados Unidos.
Durante el rodaje de la película "Oppenheimer", dirigida por Christopher Nolan, la actriz Emily Blunt solía llevar botas tipo pantuflas marca Ugg en el set de filmación. Esto enfurecía al director, ya que él es conocido por su obsesión por la verosimilitud y la precisión histórica en sus películas, incluida la vestimenta de los personajes.
Cada vez que tenía la oportunidad, Emily Blunt se descalzaba para ponerse sus cómodas botas Ugg en lugar de los zapatos de su personaje. Nolan no estaba contento con esta elección de calzado, ya que temía que la actriz perdiera tiempo cambiándose de zapatos y retrasara el rodaje. A pesar de la insistencia de Nolan para que Blunt usara los zapatos adecuados para el personaje, la actriz continuó llevando sus botas.
Al concluir el rodaje, Emily Blunt, que previamente había trabajado en la película "El diablo viste de Prada", aprendió que un buen producto puede vencer la resistencia del comprador más reluctante. En este caso, las botitas Ugg demostraron ser el regalo perfecto para conquistar al director. Al finalizar el rodaje, Blunt le envió un par de estas botas a Nolan como un regalo de despedida. Poco después, recibió una nota de la esposa del director, agradeciéndole el regalo y confirmando que Christopher Nolan las llevaba puestas.
