Dolor lumbar, un 30% del dolor agudo

A través de la Fundación para la Formación de la Organización Médica Colegial (FFOMC), el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (COGCOM) ha impulsado el desarrollo de unas Pautas de Actuación y Seguimiento (PAS) en dolor cervical y lumbar agudo.

Elaborada por un grupo de expertos de la Sociedad Española de Dolor (SED) y la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC), la guía tiene como fin la mejora del seguimiento asistencial, poniendo el foco en el paciente y no en la enfermedad.

Implicaciones del Plan de Actuación y Seguimiento

El secretario general del CGCOM, José María Rodríguez Vicente, destaca el papel del Programa PAS para el Sistema Nacional de Salud ya que estas pautas favorecen el mejor diagnóstico de estas patologías, que al mismo tiempo incide en la carga y en el coste para el sistema. Un diagnóstico más acertado se traduce en menor carga asistencial y menor gasto sanitario.

Por su parte, la coordinadora técnica de la FFOMC, Elena Fernández, habla de un beneficio para el propio personal médico, ya que esta formación puede acreditarse a nivel nacional, europeo e internacional.

El 45% del dolor agudo: molestias en la zona lumbar y cervical

Las cifras sobre la prevalencia del dolor agudo sitúan en el primer puesto al dolor lumbar, con un 30%, y el cuarto puesto al dolor cervical, con un 15%.

El doctor Juan Pérez Cajaraville, director de la Unidad del Dolor de HM Hospitales y Coordinador de la Guía, explica: “El dolor es un elemento prioritario y transversal en el marco de las estrategias y políticas de salud del Sistema Nacional de Salud. En concreto, el dolor lumbar agudo tiene la tasa más alta de prevalencia de nuestra sociedad”.

El experto explica que el 80% de la población mundial experimenta dolor de espalda o cervical en algún momento de su vida, por lo que las consecuencias sociales, familiares, laborales y económicas son complicadas de sintetizar.

Y es que, según la información recogida en los últimos Informes Nacionales de Salud, el dolor lumbar y la cervicalgia se encuentran dentro de los cinco problemas de salud más prevalentes.

Es más, aproximadamente el 7,5% de la población mundial (en torno a 577 millones de personas) sufren puntualmente dolor lumbar, convirtiéndolo desde 1990 en la principal causa de años vividos con discapacidad.

Según datos del Global Burden of Disease (2019), el dolor lumbar fue la principal causa de discapacidad, responsable del 7,4% del total años vividos con discapacidad a nivel mundial.

De ahí que la guía determine el dolor de espalda y, en particular, el dolor lumbar y cervical, como un problema de salud a nivel global y con mayor cabida en países desarrollados. El elevado impacto asociado a los costes personales por limitación de la calidad de vida y funcionalidad, además de los costes económicos, directos e indirectos, son factores a tener en cuenta.

En este sentido, destacan los costes asociados a la dolencia, ante la pérdida de productividad laboral y la utilización del cuidado de la salud: estudios realizados en países europeos indican que los costes totales rondan en torno al 0,1% y 2% del Producto Interior Bruto.

Tratamiento farmacológico

El documento insiste en el correcto abordaje de este tipo de dolor agudo, ya que, de ser manejado de forma inadecuada, el dolor cervical y lumbar puede fácilmente derivar en algo crónico. Así, se torna en algo esencial el control precoz de los síntomas.

En lo que al tratamiento farmacológico respecta, los AINE (medicamentos antiinflamatorios no esteroideos) son la solución a la que más se recurre para el dolor de espalda.

Su acción, antiinflamatoria y analgésica, los hace la opción más eficaz. El ibuprofeno, como AINE no selectivo, es el mejor tolerado, además de que, gracias a la salificación con diversas sales (como la L-arginina, también conocido como el arginato de ibuprofeno), su principio activo se asimila con mayor rapidez.