Cómo es la lluvia de pétalos de Semana Santa en Hidalgo

¿La promesa del minero? Que si Dios lo ayudaba a sanar, regresaría cada año durante la Semana Santa para ‘inundar’ la iglesia con pétalos de rosa a manera de agradecimiento.

El milagro sucedió, por lo que la manda fue cumplida anualmente. Esto se convirtió en una tradición que sigue viviendo en Mineral del Chico y que han empalmado con la Semana Santa para celebrar la resurrección de Cristo en un espectáculo mágico que se realiza al ritmo del repique de las campanas.

Hoy en día, la gente que acude suele tomar los pétalos que caen para guardarlos y bañarse con ellos, pues piensan que están benditos y son capaces de curar enfermedades.

¿Cómo es la lluvia de pétalos?

Se lanzan las hojas multicolores al interior y exterior del templo a unos 12 metros de altura. Para ello, se necesitan unas 35 personas, quienes suben a las marquesinas de la iglesia y arrojan los pétalos, provocando un efecto de lluvia que cubre el piso en su totalidad.

En la zona, es común el cultivo de las rosas y este es uno de los días principales para la religiosidad de los locales y para los invernaderos, pues se arroja aproximadamente tonelada y media.

No solo eso, pues las pequeñas hojitas son donadas por los floricultores de comunidades cercanas como Capula, Carboneras, El Puente, La Estanzuela y Cimbrones, en una especie de manda u ofrenda.

Posterior a la lluvia de pétalos, se realiza la tradicional quema de Judas en la plaza principal, a un costado de la iglesia, para después dar paso a la verbena y baile.

¿Dónde y cuándo se hace la lluvia de pétalos?

La lluvia de pétalos se realiza en la Parroquia de la Purísima Concepción, en Mineral del Chico, Hidalgo.

Este año, la tradición se realizará el Domingo de Resurrección, este 9 de abril. La lluvia comienza al término de la misa de medio día anunciando la vuelta a la vida de Jesús.