Investigadores chinos han dado a conocer que lograron con éxito el nacimiento del primer gato clonado utilizando exclusivamente tecnología y suministros nacionales.
El felino, que pesa 141 gramos, vio la luz del día mediante parto natural el pasado domingo en la ciudad de Qingdao, después de 69 días de gestación subrogada, marcando un avance significativo en la cadena industrial de clonación animal en China.
La Universidad Agrícola de Qingdao, en colaboración con una empresa privada, estableció la base de clonación de células somáticas de mamíferos donde tuvo lugar el alumbramiento. Este logro representa un cambio crucial en comparación con procesos de clonación anteriores, como el del gato clonado Garlic en 2019, que dependían en gran medida de reactivos y equipos extranjeros.
Zhao Minghui, profesor asociado de la universidad involucrado en el proyecto, declaró a Global Times: "El nacimiento de este gato clonado demuestra que China tiene una cadena industrial completa en el campo de la clonación animal". La investigación comenzó en 2020, cuando se detectaron problemas en la estabilidad de los medicamentos importados, llevando al equipo a buscar soluciones internas.
La clonación de gatos, según Zhao, representa un avance significativo, ya que requiere mayores requisitos de equipamiento, reactivos y consumibles, y la operación es más delicada. Este nuevo logro no solo consolida la posición de China en la vanguardia de la tecnología de clonación, sino que también promete reducir los costos asociados y contribuir a la comercialización de la industria.
La empresa Sinogene Biotechnology, participante en el proyecto, ya ha clonado perros con éxito para numerosos clientes, muchos de los cuales buscan preservar a sus mascotas fallecidas. Con un precio de mercado de alrededor de 250 mil yuanes por un gato clonado y 380 mil yuanes por un perro, la clonación de animales se ha convertido en una opción viable para aquellos dueños dispuestos a pagar por la oportunidad de tener a sus seres queridos peludos de vuelta.
Este hito sigue a los avances previos de China en clonación, como el nacimiento del primer lobo salvaje ártico clonado y dos primates genéticamente idénticos en años anteriores. Sin embargo, recordamos que la investigación genética no está exenta de controversias, como lo demostró el escándalo del científico chino He Jiankui en 2019, quien afirmó haber creado bebés humanos genéticamente modificados.
Por ahora, las autoridades chinas, han revisado las regulaciones, especialmente después de casos controvertidos, como el de He Jiankui, destacando la importancia de una aprobación de nivel nacional para investigaciones clínicas en campos de alta tecnología biomédica. Las nuevas directrices éticas, publicadas en marzo de 2022, reflejan el compromiso del Gobierno chino con la responsabilidad y la seguridad en la investigación científica.
