El viernes el piloto mexicano vivió una terrible sesión, así que el tercer puesto mejora sus perspectivas
El inglés Lewis Hamilton (Mercedes), siete veces campeón del mundo de Fórmula Uno, fue el más rápido este sábado en el último libre para el Gran Premio de Hungría, el undécimo del Mundial, que se disputa en el Hungaroring, el circuito de las afueras de Budapest, donde los españoles Carlos Sainz (Ferrari) y Fernando Alonso (Aston Martin) marcaron el octavo y el noveno tiempo, respectivamente.
En la mejor de sus veinte vueltas, Hamilton cubrió los 4.381 metros de la pista húngara en un minuto, 17 segundos y 811 milésimas, 250 menos que el neerlandés Max Verstappen (Red Bull) -líder destacado del Mundial- y con 263 de ventaja sobre el compañero de éste, el mexicano Checo Pérez, segundo en el campeonato, a 99 puntos y que, al igual que los anteriores, dio el mejor de sus 25 giros con el neumático de compuesto blando.
Sainz, quinto en el Mundial, giró en 29 ocasiones y en su mejor intento se quedó, con las gomas blandas, a 423 milésimas de Hamilton, en una sesión soleada que acabó con 25 grados centígrados ambientales y 47 en el asfalto.
Alonso, que vuelve al escenario de la primera de sus 32 victorias -hace casi veinte años-, completó, al igual que la mayoría, su mejor vuelta con el neumático blando.
El doble campeón mundial asturiano (2005 y 2006), tercero en el campeonato, repitió veinte veces la pista en la que buscará su ansiada '33' y en su vuelta rápida se quedó a 539 milésimas de Hamilton.
La calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera de este domingo -prevista a 70 vueltas, para completar un recorrido de 306,6 kilómetros.
